La marcha pacífica que la mañana del domingo realizaron familiares y amigos de la menor Samantha N, asesinada el pasado jueves, para exigir justicia por ella y su tío, quien recibió un disparo en el tórax, coincidió con el desfile alusivo al Día del Niño, organizado por el gobierno de Tulancingo.

Derivado de ello, las autoridades solicitaron a los manifestantes que, para no afectar el desarrollo del evento, fueran los primeros en pasar.

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Ataviados de blanco, quienes participaron en la marcha portaban lonas que incluían la fotografía de la menor, quien tenía siete años, con leyendas como “Tus hijos hoy juegan, Samantha ya no pudo, apagaron su vida”.

Mientras el contingente avanzaba en silencio, detrás de este la música anunciaba el desfile que formó parte de las actividades del festejo que con antelación organizó el gobierno de Tulancingo, con motivo del Día del Niño.

Familiares de Samantha aclararon que su intención nunca fue que el desfile se suspendiera, sino buscar “que su muerte no se olvide y que al homicida se le aplique la pena máxima”, como garantizó el encargado de Despacho de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH), Francisco Fernández Hasbun.

Al término del desfile y ante el rumor de que el presunto responsable del asesinato de la menor, quien también hirió de gravedad a Diego N, el tío de la fallecida, presuntamente laboraba como escolta del alcalde Jorge Márquez Alvarado, el edil negó tal versión.

“En épocas electorales, cualquier situación es aprovechada de una manera no correcta”, recriminó y refirió que lo vigilan dos militares retirados.

María Antonieta Islas | Tulancingo