Que, por fin hoy, se renovará la dirigencia municipal del PRI en Pachuca, tras meses de especulaciones y negociaciones. Finalmente, quien asumirá como dirigente de la estructura en la capital del estado por segunda ocasión, aseguran, es Bernardo Arista, quien habría desplazado a David Hernández Martínez, quien peleó por el puesto desde hace meses.

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que, aunque parezca que no, muchos se acuerdan de cuando Gerardo Sosa Castelán, dueño de la UAEH, operaba para el PRI, partido al cual renunció oficialmente hace unos días. En su carta de renuncia, Sosa asegura que dejar los beneficios para la gente como una eterna promesa es una forma de engaño a nuestro pueblo. Por lo cual, asegura, no somos un estado pobre, somos un estado empobrecido que vive una condición de subdesarrollo sostenida y administrada para beneficio de unos pocos. En esto, se le olvidó señalar que él ha sido uno de esos pocos, pues se ha enriquecido, tiene decenas de propiedades y viaja en aviones privados.

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que trasciende también que la reestructuración de los delegados municipales del PRI sucederá en casi todos los distritos electorales locales de la entidad. Hasta donde se sabe, su dirigente estatal, Leoncio Pineda Godos, trae bajo los brazos propuestas que ya han preocupado a aquellos que fungen hasta ahora como delegados y donde su trabajo no ha rendido buenos frutos.

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que quien le siguió el juego a Oscar Pelcastre, El Perro, fue la regidora panista Aurora Mohedano Romero, y es que durante la manifestación que encabezó el líder de los ambulantes, la asambleísta, queriendo pasar desapercibida, fue a comprar una bolsa de sal y una sustancia en pequeños recipientes para después hacer una especie de rito en la periferia de Casa Rule, y no sólo eso, antes de entrar a su oficina, arrojó dicha sustancia a los bolillos y sal que minutos antes Pelcastre Almanza había colocado a la entrada del inmueble. Y es que es bien sabido que Mohedano Romero tiene gusto por la hechicería y magia negra; no sabíamos que la practicaba en las oficinas en las que despacha.

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que el alcalde petista Nabor Peréz Juárez, de Xochicoatlán, aparte de tener a sus familiares trabajando en la administración municipal, ahora es señalado de darles empleo a delincuentes, como el caso de José Hernández, acusado de haber violado a una menor en el barrio de Tepeco.