Este sábado seremos testigos del último destello del Rayo jamaiquino; Usain Bolt saltará una vez más a la pista junto a sus compatriotas para participar en la prueba de relevo 4×100 en el Mundial de Atletismo que se celebra en Londres.

Aunque se había especulado que no participaría en la prueba, Bolt aseguró que sí verá acción y buscará colgarse su metal áureo número 12 de las competencias mundiales.

Luego de esta prueba Usain colgará los tenis, dejando un legado y una gran historia en las pistas que será muy difícil de superar.

El Rayo, que saltó a la fama y se robó los reflectores en aquellos Juegos Olímpicos de Beijing 2008 al conseguir tres medallas de oro y tres récords mundiales, dirá adiós.

Aquel pequeño que comenzó a destacar por su velocidad en Trelawny, Jamaica, cuando apenas tenía 12, tal vez nunca imaginó se convertiría en el hombre más rápido del mundo (quizá lo soñaba); a sus 30 años dejará una marca en la prueba reina complicada de abatir.

En 2009 paró el crono en 9.58, una marca que al día de hoy parece inalcanzable hasta para él, pues apenas el pasado viernes se tuvo que conformar con el bronce (9.95) en los 100 metros, siendo superado por los estadunidenses Justin Gatlin (9.92) y Chris Coleman (9.94).

A pesar de que el astro jamaiquino no se colgó el oro como él y los aficionados hubiéramos querido, atesoramos los grandes momentos que quedaron para la historia, ver a ese hombre correr como si fuera fácil, e incluso cruzar la meta cómodamente como si no hubiera cansancio y además con una peculiar sonrisa. Se irá en buen momento, 30 años parecieran que son pocos y que tendría el potencial para seguir compitiendo, pero creo  es reflejo de su gran humildad y sensatez bajar el telón en este momento. Afortunados somos los que vivimos en la época de Bolt. 

VAYA LÍO

Como todos sabemos, Rafael Márquez, referente del futbol mexicano, ha sido ligado con Raúl Flores Hernández y se le acusa de ser presuntamente testaferro del supuesto narcotraficante.

El káiser inmediatamente puso manos a la obra, se presentó a declarar a la PGR y ofreció una rueda de prensa en la que negó tener relación alguna con El Tío.

Por ahora, no sabemos si las autoridades americanas o el futbolista mexicano tienen la razón, lo cierto es que Márquez está en toda la disponibilidad de colaborar para aclarar su situación.

Desde mi particular punto de vista creo que el capitán del Tri se rodeó de malas “amistades”, que lo llevaron a tener no una participación directa con el crimen organizado, pero que terminó involucrándose, ya sea a través de algunos negocios o fundaciones.

Muestra de ello es lo que hemos visto en Europa, futbolistas con problemas fiscales por evadir impuestos, porque las personas en las que confiaron para llevar a cabo su contabilidad, literal, les hicieron una mala jugada.

Esperemos que el buen Rafa salga bien librado y que su retiro de las canchas sea con un partido de futbol y no por estos líos legales.