Lo que se vivió el martes pasado en las eliminatorias mundialistas estuvo de locos. Los ojos del mundo entero estaban puestos en la eliminatoria de Conmebol por la posible eliminación de Argentina, y peor aún, la no participación de Lionel Messi en Rusia 2018.

Sin embargo, lo que paso alrededor de todo planeta fue realmente emocionante. El cronista que narró con gran emoción y llanto los dos goles que le dieron a la Selección de Islandia su primer boleto a una justa internacional, volvió a saltar a la fama luego de su actuación detrás del micrófono en la Eurocopa pasada.

En el medio oriente se volvieron casi locos, cuando con el penal de Mohamed Salah, los Faraones regresarían a un mundial después de 20 años. Y en Perú los comentaristas incas explotaron con el gol de Paolo Guerrero, con el cual se metieron al repechaje.

Por su parte, los argentinos se acabaron todos los calificativos para adorar a Lionel Messi, quien se lució en patio ajeno con un hat-trik y metió a Argentina al Mundial. La prensa albiceleste estaba dividida, algunos creían en que La Pulga mostraría su grandeza e irían a Rusia; sin embargo, el resto lo tachaba de pecho frio, como ya lo han hecho en otras ocasiones, y no ponían la más mínima esperanza en él; al final todos terminaron rindiéndose a los pies de uno de los mejores jugadores del mundo.

Todo esto, de lado de los que consiguieron el ansiado boleto o por lo menos meterse al repechaje. Sin embargo, los comunicadores también despotricaron contra las selecciones que no lograron el objetivo como fue el caso de: Chile, Holanda y Estados Unidos.
Los comunicadores no puedieron retener la frustración y el enojo que esta situación les provocó.

De lado de los que nos dedicamos a los medios de comunicación es imposible sólo o narrar imparcialmente lo que en este caso se vivió en la pasada jornada. Por lo que algunos colegas también se llevaron los reflectores y hasta nota dieron con sus peculiares narraciones.

Estas cosas no se dan cada ocho días, esto, pasa cada cuatro años en la eliminatoria y durante el mundial, y es ahí cuando surgen aquellas trilladas frases: es algo más que futbol o no sólo son 11 contra 11.

Esperemos que el mundial que está a la vuelta de la esquina nos permita vivir las mismas o más emociones que disfrutamos en el cierre de las eliminatorias y que quienes se planten detrás de un micrófono nos pongan una vez más la piel chinita.

¡Gracias por hacernos disfrutar aún más del bendito futbol!