Seguro muchos de ustedes se siguen preguntando por qué Gerardo Alcoba ha tardado tanto en regresar a la actividad. Bueno, pues ahí les va el panorama.
Les platico que el defensa no ha jugado en todo el Apertura 2016 debido a que tuvo una lesión en el recto (o muscular, como lo maneja oficialmente el club) en el inicio de la pretemporada de Pumas, allá en Acapulco.
El tiempo pasó, el zaguero no quedaba y una semana antes del inicio del semestre futbolístico (15 de julio) él pensaba que tardaría unos 15 a 20 días en regresar.
Alcoba iba viento en popa con su rehabilitación, incluso previo al juego ante León (J3) el sudamericano entrenó con el grupo sin problemas y apuntó a regresar ante Necaxa en la jornada siguiente.
Sin embargo, las cosas se complicaron de repente, al grado de que el jugador no viajó a Aguascalientes, pues ese fin de semana (6 de agosto) tuvo que visitar el quirófano para ser atendido del problema. Alcoba, por supuesto, está que se lo lleva la fregada, pues ya quiere aportar al equipo, el problema es que su fecha de vuelta tras la última intervención es con un estimado para la fecha 8, ante Querétaro el próximo 11 de septiembre.
Ojalá y que le alcance la paciencia.

RIVAL EN PROBLEMAS
Mientras en México nos desgarramos las vestiduras por el papelón del Tri en la Copa América y por el ánimo con el que arribarán los seleccionados tras revelarse la convocatoria de Juan Carlos Osorio, en El Salvador están viviendo su
propio infiernito.
A pesar de que los futbolistas ya no están en huelga y el técnico Ramón Maradiaga ha podido armar una plantilla más fuerte para la continuación de la eliminatoria mundialista, la realidad es que, por cuestiones de calendario, sólo ha podido entrenar con 10 futbolistas.
Y eso no es todo… Lo peor es que el martes pasado, al llegar a la cancha de la Universidad de El Salvador, en donde tenía programada su práctica, se encontró con que ésta ya estaba siendo utilizada por jugadores del equipo local, debido a que los federativos salvadoreños no hicieron bien las gestiones para apartar el sitio.
Así que a Maradiaga y a la plantilla no les quedó de otra que irse con todo y sus tiliches al gimnasio, después de comprender que, en El Salvador, el enemigo está en casa.

APROVECHA EL TIEMPO
El que no ha perdido la oportunidad de darse un rol por su nueva ciudad es el chileno Enzo Roco.
El defensa del Cruz Azul, que se hizo de la titularidad en la central, ya se lanzó a conocer lugares como el lago de Chapultepec, donde incluso ya se trepó a las lanchas de pedales.
Además, Roco se ha dejado ver por algunos de los principales centros comerciales, así como en exclusivos restaurantes de la capital.
Ojalá que todo siga mejorando en La Máquina para que nadie le pueda reclamar los eternos fracasos celestes y así pueda continuar visitando lo mejor de la Ciudad de México.