Con Atlas salvado y Guadalajara enfocado en la final de la Liga de Campeones de la Concacaf, ambos equipos sin posibilidades de acceder a la liguilla, este viernes se realizará una edición más del clásico tapatío.

Rojinegros ha tenido un paso ascendente desde que Gerardo Espinoza asumió la dirección técnica, con el que han ganado dos y empatado uno en los tres juegos que ha dirigido, lo que le valió al equipo para asegurar la permanencia en el máximo circuito.

Ubicado en la penúltima posición de la general, con apenas 14 unidades, en el equipo rojinegro saben de la importancia de ganar partidos como éste, sobre todo por la rivalidad deportiva con su acérrimo enemigo, por lo que buscarán dar una satisfacción más a su gente.

Luis Reyes, quien se recuperó de una molestia muscular, ya estará listo para jugar, lo mismo que el portero Óscar Ustari, quien la víspera recibió el alta médica, luego de más de cinco meses desde que se lesionó una rodilla. Además, éste podría ser el último clásico tapatío de Rafael Márquez.

Por su parte, Chivas tampoco se juega nada en el certamen local, pero el miércoles recibirá la vuelta de la final de la Concachampions ante Toronto, por lo que prácticamente es un hecho que guardará a sus mejores hombres.

El Rebaño Sagrado, antepenúltimo de la general con 15 unidades, una más que Atlas, llega con dos derrotas seguidas, racha que busca romper y terminar de la mejor manera posible el certamen, pero con el partido contra Toronto como principal objetivo y motivación.

A Chivas le ha ido bien en los últimos clásicos ante Atlas cuando juega como visitante, pues sumó cuatro empates y cuatro triunfos en los más recientes, y seis victorias y dos igualadas en la última decena jugada en cualquier cancha.

Notimex I Guadalajara