La Plaza Independencia, con el Reloj Monumental, fue la principal sede de los festejos de la afición de los Tuzos del Pachuca por el título de La Concachampions y el pase al Mundial de Clubes.
Durante sus festejos los aficionados movían los autos, algunos saltaban sobre los toldos y cofres, además fue evidente el uso de pirotecnia, sin embargo, elementos de seguridad resguardaban la zona.
“Nos vamos al Mundial, nos vamos al Mundial”, gritaron los eufóricos seguidores al pie del histórico monumento, lanzando vítores para Franco Jara, autor del gol de título, e Hirving Lozano, el ídolo de los Tuzos.
Incluso, algunos turbantes improvisados aparecieron en los festejos, haciendo referencia a que el Mundial será en los Emiratos Árabes Unidos. Además, había comerciantes que aprovecharon para vender tequileros, banderas y gorras.
Así se vivió la fiesta que se prolongó hasta altas horas de la madrugada, en la que la afición, que ha hecho valer el estadio Hidalgo, pintó de azul y blanco el centro de la capital.