Polémico empate. Las Tuzas del Pachuca igualaron
1-1 con Cruz Azul, resultado que les causó amargura, ya que en la última jugada del encuentro el árbitro no marcó un penal para las locales.

El estadio Hidalgo fue el escenario de este duelo de la jornada 11 de la Liga MX Femenil, el cual deja a las hidalguenses muy comprometidas, pues están con 21 puntos, a cinco unidades del líder América, con quien se enfrentan el sábado, y dos arriba de Toluca, que ya les pisa los talones.

La visita tocó a la puerta primero al 18’; Gloria Abitia trató de sorprender a la guardameta tuza con un disparo directo desde fuera del área, el cual pasó apenas por encima del travesaño.

Instantes después, tras un error de la zaga blanquiazul, Reyna Velázquez quedó cerca de anotar, pero fue una rápida reacción de la guardameta Alejandría Godínez lo evitó.

Al 23’, Berenice Muñoz dejó ir una ocasión muy clara de darles la ventaja a las locales, cuando Jaquelin García metió un centro al área y la delantera no pudo hacer contacto.

Eso lo lamentarían al 32’, cuando Cruz Azul encontró el gol, vía Gabriela Guevara. Tras un disparo, el rebote que dio la arquera tuza le quedó a la 10 de las celestes, que solamente la tuvo que empujar para mandarla guardar a las redes y poner el 0-1.

Antes de culminar la primera mitad, las blanquiazules quedaron cerca de empatar con un tiro libre adelante de mediocampo, en el que Michelle González disparó al arco y la pelota fue al travesaño, y después Muñoz no pudo mandarla al fondo.

En el complemento bajaron las emociones, con las locales buscando el empate y La Máquina ordenada para tratar de conservar la ventaja.

Esto terminó al 72’, cuando Esbeydi Salazar definió al ángulo superior después de varios toques cerca del área para poner la igualada 1-1, aunque las Celestes quedaron cerca de recuperarse con otro tiro libre lejano que fue al larguero.

Las Tuzas siguieron buscando el gol de la diferencia hasta el último instante en el que llegó la polémica. Esbeydi Salazar controlaba la pelota en el área y una defensa azul le barrió cometiendo falta, pero el árbitro Alfredo Medina no lo señaló, lo que ocasionó airadas reclamaciones, pero de inmediato pitó el final del encuentro.

Esto provocó un sentimiento de frustración en jugadoras como Fátima Arellano, que se tiró a la cancha lamentándose y fue levantada por su entrenadora Eva Espejo para después reunirse en equipo en el centro del campo.

Ahora tendrán un importante encuentro este sábado ante las Águilas del América, en el estadio Azteca, donde las Tuzas están obligadas a ganar para poder mantener la distancia con las líderes.