Los estudios aplicados por la Secretaría de Desarrollo Agropecuario (Sedagro) descartan mercurio en la carne de crías de carpa sembrada en la presa Las Fuentes, Singuilucan, pero revela presencia de zinc, que puede acumularse en concentraciones que causan daño a la salud de los consumidores. En los peces además se detectó aluminio, hierro y manganeso.
El estudio del Laboratorio Análisis Técnicos SA de CV (Agrolab) a un kilogramo de carpa recogido a las 11:00 horas del 14 septiembre en el bordo La Fuente 1 fue interpretado por el Comité Acuícola Hidalguense, a cargo Juan Nicolás Hernández Barrera.
Para interpretar los valores permisibles de esos minerales en los animales acuáticos, el organismo se basó en la NOM-242-SSA1-1994, de la cual este medio no halló referencias. En una búsqueda, Criterio observó que la NOM-242-SSA1-2009 es la última certificación para determinar la calidad de productos de pesca frescos, refrigerados, congelados y procesados.
El Comité Acuícola Hidalguense envió el oficio CAHSAC/169-4/17, con fecha 22 de septiembre de 2017, a Carlos Muñiz, titular de la Sedagro, a quien recomienda analizar la posible fuente de los minerales hallados en carpas, hacer un monitoreo anual del producto y señalar que no hay referencias para determinar niveles permisibles de los metales encontrados en la carne de los peces.
Según el reporte, la muestra expone una concentración de “560.09 mg” de aluminio, “que en condiciones normales no es un metal preocupante”, y de “325.36 mg/kg” de hierro, interpretado como “bajo y no representa un problema para el consumidor”. Así como “9.60 mg/kg” de manganeso, con las mismas especificaciones que el metal anterior, y zinc, con “29.58 mg/kg”, que “puede acumularse en concentraciones que causen daño a la salud de los consumidores”.
La carne del pescado también presentó coliformes fecales y E Coli en bajas cantidades, sin riesgo de salmonella spp.
El estudio también revela concentraciones de aluminio y manganeso en el agua de cultivo de los peces: el primero puede ocasionar disminución en su crecimiento en altas concentraciones; mientras, el segundo no representa un “riesgo para la acuacultura”.
SEÑALAMIENTO
En septiembre, la organización civil Singuilucan Justicia Social acusó que la Secretaría de Desarrollo Agropecuario de Hidalgo sembró crías de carpa en la presa Las Fuentes, pese a las concentraciones de metales pesados que reveló un análisis de la UAEH.
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