Los hospitales de Metztitlán y Zimapán, de los cuales sólo hay “huacales” y están inconclusos, comenzarán a funcionar en 2018 con recursos gestionados ante la Secretaría de Salud (Ssa) federal, los cuales provendrán de los subejercicios estatales, afirmó el gobernador Omar Fayad Meneses.

El mandatario indicó que el recurso que se debe pagar es referente a la operación de los nosocomios, pues “en el edificio se gasta una vez”.

La remuneración a los médicos, enfermeras y administrativos es lo que resulta más costoso, añadió.

“Un acuerdo que sostuve con el secretario (de Salud federal, José) Narro (…) me va ayudar, nos va ayudar porque al final del año hay áreas que tienen subejercicios (…) esas economías de distintos estados, vamos a contar en los tres primeros meses del año con ese recurso”, explicó.

El exedil de Pachuca expuso que junto con diputados y colaboradores del gabinete buscaron el recurso necesario para la operación, aunque lo complicado radica en la creación de plazas, situación que, dijo el mandatario, no es posible.

El anuncio fue dado en la Ceremonia de Trabajando por la Salud Hidalgo Crece Contigo, donde hizo la entrega de estímulos por años de servicio, el premio Caminado a la Excelencia, además de certificaciones.

Fayad también adelantó la construcción de un nuevo hospital ginecobstétrico en la capital hidalguense. Posteriormente, en entrevista, el secretario de Salud estatal, Marco Antonio Escamilla Acosta, comentó que el planteamiento es para un nosocomio materno infantil, para atender los múltiples casos que se registran en la entidad.

RESULTA COSTOSO

El 14 de noviembre pasado, el mandatario dijo que para concluir la edificación de los hospitales de Zimapán, Metztitlán y Actopan se requería una inversión total de 389 millones de pesos.