Organizaciones campesinas conformaron el Movimiento de Resistencia Civil de Hidalgo para exigir al gobierno federal, senadores de la república y diputados federales, que den marcha atrás al incremento del precio de los combustibles en el país.
De lo contrario, advirtieron, promoverán entre la población del estado una desobediencia civil para que no se paguen impuestos y servicios, afectando las finanzas de los tres órdenes de gobierno.
Los dirigentes estatales y las organizaciones firmantes del movimiento son: Reynaldo Galván Montes, de la Unión de Productores Agropecuarios y de Servicios de México (UPASM); Ernesto González, de El Barzón; y Martha López, de la UNTA.
También, Marco Antonio Rico Mercado, de la Coduc; Luciano Cornejo Barrera, de la Unión General de Obreros y Campesinos de México (UGOCM); Gabriel Estrada Barrera, de la Central Independiente de Obreros y Campesinos (CIOAC), y Erasto Tolentino Castro, de la coordinadora Nacional Plan de Ayala (CNPA).
Reunidos a un costado del monumento a la Revolución Mexicana, los dirigentes campesinos demandaron cuatro puntos: Que se implemente un periodo extraordinario en el Congreso de la Unión para bajar el precio de los combustibles, gas doméstico y energía eléctrica.
También, aumentar el salario de los trabajadores en por lo menos 50 por ciento y apoyo a los afectados por parte las autoridades.