Ante la temporada de invierno, la Secretaría de Salud exhorta a la población a reforzar las medidas preventivas, principalmente en niños menores de cinco años y adultos mayores, que son más propensos a padecer alguna enfermedad respiratoria.
Se deben poner en marcha las siguientes recomendaciones: evitar la exposición a los cambios bruscos de temperatura, así como las corrientes de aire especialmente, abrigándose principalmente durante la mañana y noche.
Reforzar las defensas con alimentos y complementos ricos en vitaminas A y C (frutas y verduras), así como abundantes líquidos.
Es importante lavarse las manos de manera frecuente con agua y jabón, o usar alcohol y gel; evitar el contacto estrecho con otras personas; no saludar de mano y beso; toser y estornudar cubriéndose con un pañuelo, o con el ángulo que forma el brazo con el antebrazo. En caso de presentar signos y/o síntomas respiratorios evitar asistir a lugares concurridos, no automedicarse, y acudir a su Centro de Salud o Unidad Médica más cercana.
Así también, se invita a la población vulnerable a que se apliquen la vacuna contra la influenza, un servicio que se ofrece gratuito.