De 133 homicidios ocurridos en Hidalgo entre enero y julio de 2017, 56 habrían estado relacionados con la delincuencia organizada, reveló el Semáforo de Ejecuciones, que ubicó a la entidad entre las siete entidades con menor número de ajustes de cuentas.
Pese a que Hidalgo es una de las regiones con cifras rojas más bajas, en los primeros siete meses del año reportó en esta categoría 14 homicidios más que durante todo 2016, cuando se acumularon 42.
De acuerdo con el reporte emitido por la iniciativa Semáforo Delictivo, en coordinación con Lantia Consultores, durante 2016 se registraron 12 mil 224 incidencias en México, de las cuales 6 mil 493 ocurrieron los primeros siete meses del año.
En 2017, de enero a julio, suman 10 mil 328 asesinatos vinculados con grupos criminales, lo que representa un incremento de 59 por ciento respecto del periodo anterior,
Con menos ilícitos que Hidalgo se ubican Campeche con 13; Aguascalientes, 16; Yucatán, 19; Tlaxcala, 38; Querétaro, 48, y Chiapas, 52.
Por el contrario, el mayor número de presuntos ajustes de cuentas en lo que va de 2017 lo contabilizaron Veracruz con mil 202 casos; Guerrero, mil 146; Guanajuato, mil 57; Michoacán, 725; Sinaloa, 667, y Chihuahua, 630.
En julio, el país registró mil 537 homicidios presuntamente vinculados con la delincuencia, lapso que ha sido el más violento en territorio hidalguense.
Según el estadístico, de los 56 ilícitos, 14 se suscitaron el mes anterior; entre ellos, el multihomicidio acontecido la noche del 12 de julio, en el fraccionamiento Villa de los Milagros, en Tizayuca, donde 11 asistentes a una fiesta infantil (siete mujeres y cuatro hombres, incluidos dos menores de edad), fueron asesinados con arma blanca.
El número de casos ascendió a cuatro, en junio; con ocho delitos cada uno enero, marzo, abril y mayo, así como seis durante febrero de este año.
El pasado 8 de agosto, en la región Tula se registró una jornada violenta con cinco ejecuciones, tres de ellas podrían estar relacionadas entre sí, señaló un día después el coordinador Estatal de Seguridad, Uriel de Jesús Moreno Castro.
Fueron privados de la vida tres en Tezontepec de Aldama, uno más en Tepetitlán y otro en Tula de Allende.
