Las fuerzas políticos de oposición urgieron al gobierno del estado a cambiar la estrategia de seguridad, ya que consideraron que la recurrencia de delitos de alto impacto, como la muerte de 11 personas en Tizayuca por un supuesto “ajuste de cuentas” o la balacera en Calzada Veracruz, en Pachuca, reflejan el “fracaso” para combatir la inseguridad.

Asael Hernández Cerón, dirigente del PAN; Ramón Flores Reyes, del PRD, y Abraham Mendoza Zenteno, líder de Morena, coincidieron en que deben ser revisados criterios de inteligencia, capacitación policiaca y coordinación con los ayuntamientos y el gobierno federal.

Por otra parte, el coordinador de Movimiento Ciudadano, Damián Sosa Castelán, aseguró que la administración carece
de un plan efectivo para enfrentar la delincuencia.

Por su colindancia con una de las entidades más violentas del país, Estado de México, Hidalgo es vulnerable a que criminales ingresen a tirar cuerpos como ha sucedido, señaló el panista, y ahora es necesario prevenir que se instalen a operar.

“Las evidencia es clara, ya no pueden decir que son hechos aislados, para atender un problema hay que reconocer que existe”, sostuvo.

En ese mismo sentido, Sosa Castelán opinó que “serían aislados si ocurrieran en Baja California”, pero cada una de las eventualidades se ha suscitado en el estado, como el asesinato de José Augusto Vega, alías El Pino, presunto exenlace entre los Zetas y corporaciones de seguridad, en Vista Hermosa; la ejecución del líder de taxistas de Tizayuca, o el asalto de cuentahabientes en bulevar Río de las Avenidas.

“En campaña, el gobernador –Omar Fayad– hizo alarde de que tiene muchas experiencia en temas de seguridad, pero no se ha notado”, reprochó.

Para el presidente del sol azteca, la estrategia debe considerar la participación ciudadana “porque no puede haber un policía en cada esquina”.

Asimismo, la transformación no sólo incluye tareas de inteligencia, sino fomentar la coordinación con el ayuntamiento para incentivar la colaboración entre vecinos en ese tipo de fraccionamientos, que se convierten en dormitorios de quienes delinquen en la entidad vecina, planteó Mendoza.

“Vienen a tirar los cuerpos porque no hay vigilancia.Lo de Tizayuca es un aviso, sino se toman cartas en el asunto, el crimen organizado se va a acostumbrar a que pueden operar en Hidalgo sin consecuencias”,

Damián Sosa, líder de MC