La empresa de autobuses Estrella Roja del Sur negó dar a legisladores de la Comisión Especial de Seguimiento al Caso Ayotzinapa información relevante sobre el secuestro de dos de sus unidades la noche de la desaparición de los 43 normalistas.

Durante una sesión privada de trabajo, la representante legal de la empresa, Susana Monterrubio Santana, indicó que no se daría mayor información porque no era su obligación hacerlo. Ello provocó que diputadas de Morena y Movimiento Ciudadano abandonaran la reunión de trabajo.
Las legisladoras relataron que la abogada cuestionó, incluso, la razón por la que la Comisión Especial había solicitado su participación. Indicaron que la abogada advirtió que los choferes de los autobuses secuestrados por los jóvenes la noche del 26 de septiembre de 2014 ya declararon ante la Procuraduría General de la República (PGR), y lo hicieron a título personal, sin el acompañamiento de la empresa.
La presidenta de la comisión, la panista Guadalupe Murguía, indicó que la representante legal acudió, esencialmente, a exponer los daños económicos que tienen las líneas de autobuses por los secuestros de las unidades. Dijo que no hubo información relevante por parte de la empresa, a pesar de que Estrella Roja del Sur no sólo es propietaria de dos camiones agredidos en el primer ataque a los jóvenes, en la calle Juan N. Álvarez, sino también porque es la operadora de la terminal de autobuses de Iguala.
Las diputadas Cristina Gaytán, de PRD, y Araceli Damián, de Morena, mencionaron que la abogada tuvo una actitud grosera y de nula disposición a cooperar con la Cámara de Diputados para aportar información que ayude a esclarecer lo sucedido sobre la desaparición de los jóvenes.
Tal fue la actitud de Mon-terrubio Santana que las diputadas Araceli Damián y Marbella Toledo, esta última de Movimiento Ciudadano, abandonaron la reunión.