Con la incertidumbre económica del año pasado que generó el aumento del precio del dólar y el incremento de las tasas de interés, algunos proyectos del sector construcción debieron retrasarse, lo que causó la reducción de empleos en el sector.
En 2016, el empleo en la construcción cayó 2.17 por ciento, de acuerdo con datos del Inegi.
A lo largo del año pasado, cada mes, los empleadores contrataron en promedio 619 mil 75 trabajadores para construcción, mientras que en 2015 el promedio ascendió a 632 mil 814 puestos, que en términos absolutos resultó en una baja de 13 mil 738 empleos. De acuerdo con Alejandro Ruiz, socio líder del sector de construcción de KPMG en México, el retraso de proyectos comenzó a presentarse especialmente a partir del segundo semestre de 2016.
Sin embargo, el respiro que ha registrado el tipo de cambio, una buena política fiscal, así como una inflación y tasas de interés moderadas podrían favorecer los proyectos retrasados y reactivar al sector, opinó el especialista.
“Sobre todo los que son privados de gran impacto en la infraestructura y yo sugiero que esto comenzará a verse a partir del segundo trimestre de 2017, pero con mayor fuerza en el segundo trimestre del año siguiente”, detalló.
Aunque la obra privada tiene una importancia relevante para el sector, el experto de KPMG considera que la pública se acelerará en el marco de las elecciones de 2018.
Para este año la tendencia en el empleo sigue a la baja, pues recientemente el Inegi reportó que el personal ocupado total en las empresas constructoras se redujo 3.9 por ciento anual en enero de este año, al ubicar la cifra de puestos en 606 mil 732.