Presidentes de organizaciones defensoras de derechos humanos desaprobaron la alusión al asesinato de Fernanda Lavalle –quien integró la comunidad lésbico-gay– que hizo Francisco Xavier Berganza Escorza, candidato del Partido Acción Nacional (PAN) a la gubernatura, durante el debate organizado por el Instituto Estatal Electoral (IEE), ya que consideraron que evocó un crimen transfóbico, que no ha sido esclarecido, con un fin político. 

También lamentaron la insinuación de un posible involucramiento en este delito por parte de su opositor priísta Omar Fayad, así como la referencia “despectiva” hacia la orientación sexual.
“La alusión al asesinato de Fernanda Lavalle (‘un transexual’, como dice Berganza, aunque su identidad era de mujer) es delicada. Habla de una amenaza (de Fayad hacia la activista asesinada) que yo desconozco, pero lo que parece importarle más es enfatizar el hecho de que estaba relacionada con él (Omar), lo cual es, también, irrelevante, a menos que su acusación fuera verdad. Yo no recuerdo al candidato del PAN manifestándose alguna de las ocasiones en que hemos exigido el esclarecimiento del asesinato”, dijo Alejandro Huerta, quien representa a la Asociación por la Diversidad Sexual 1791.

Sobre la insinuación de Berganza Escorza de una preferencia homosexual del candidato priísta –a quien, especificó, no apoyan–, el también doctorante en Ciencias Políticas y Sociales por la UNAM expuso que no es un argumento político legítimo.

“Desvirtúa el debate, victimiza al atacado y viola derechos humanos al fomentar la violencia contra la comunidad LGBTI, pues presenta a la homosexualidad como algo cuestionable”.

Por su parte, el presidente de la Asociación contra la Discriminación y por los Derechos Humanos (Acdi), Alfredo Alcalá, dijo que insinuar una probable responsabilidad en el asesinato que ocurrió en junio de 2011, “sin pruebas, sin ningún tipo de sustento”, es grave.

“No podemos caer en generar una cultura de odio por orientación sexual cuando se lucha por erradicar la discriminación (…) Aún más grave es querer vincular, sin ninguna prueba, a un candidato con un crimen de odio que aún lacera la lucha por los derechos humanos”.

En un debate, añadió el politólogo, “todo lo que tienen que ver con el servicio público es importante que la sociedad lo conozca, pero la preferencia sexual de cualquier persona es irrelevante al momento de gobernar o de representarnos”.

Vacía, su forma de hacer debate

“Utilizar, para denostar, casos que han demostrado la violación de los derechos humanos habla del tipo de persona que pretende llegar a la gubernatura. Tenía claro que la plataforma política del PAN es conservadora, pero más allá me parece una doble moral”, comentó Bertha Miranda, representante de la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos.

“Que vacío su forma de hacer debate, sin propuestas, sólo con expresiones que indignan y lastiman al tejido social”, expuso.