El grupo opositor al traslado de desperdicios mineros de Pachuca a Epazoyucan criticó la demora por parte de la Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente (Proespa), pues aún no ha realizado el estudio del terreno.

A casi dos meses de haber solicitado el estudio a la instancia gubernamental y tras finalizar el periodo de respuesta, los quejosos no han obtenido información sobre los probables problemas ambientales que ocasionaría el traslado de los jales al municipio.
“Iban a hacer un estudio y no se ha hecho, no tenemos respuesta de los documentos que se tramitaron aún. Ya pasó el tiempo de respuesta que tienen, Proespa iba hacer una supervisión de la zona, en eso se quedó; todavía no tenemos la fecha que van hacerlo”, dijeron.
Los opositores manifestaron que tras más de un año en protesta “para preservar la biodiversidad” de flora y fauna que se localiza en las 440 hectáreas de la ranchería Jometitlán, que se ubica entre Epazoyucan y parte de Zempoala, donde la Minera del Norte se pretende asentar, no han obtenido apoyo de las instancias gubernamentales.
“Se tiene que presionar a las autoridades que les corresponde dar un veredicto respecto a este tema, que al menos respondan del trámite que se está realizando, de la solicitud que se le hizo a Proespa para que verifique el caso (sic)”.
Los habitantes han recopilado pruebas para demostrar el impacto ambiental que ocasionaría el polvo mineral a los mantos acuíferos.