Debido al aumento al costo de los combustibles que entró en vigor en 2017 y de cara al segundo gasolinazo, conductores han sustituido sus automóviles por motonetas en el municipio, en las que es común observar a familias transportarse sin las medidas de protección que marca el Reglamento de Tránsito.
Principalmente por las mañanas, motonetas y motocicletas tripuladas por adultos e infantes circulan por la ciudad; sin embargo, no todos usan casco protector, constató Criterio en distintos recorridos.
El director de Tránsito y Vialidad municipal, Juan Carlos Lazcano Montes, sostuvo que es permanente el operativo para constatar que los motociclistas cumplan con lo dispuesto en el reglamento.
El mando anunció que está en puerta una campaña para concientizar a la población, sobre todo a los padres de familia, respecto al riesgo que implica transportar en motocicleta a menores sin su casco, al igual que exceder el número de pasajeros que marca la ordenanza.
A la semana, la corporación vial aplica un promedio de 15 infracciones a igual número de motociclistas por no portar casco protector, cifra que, según Lazcano Montes, ha disminuido paulatinamente a raíz de que intensificaron los operativos de revisión.
Lamentó que sea mediante una sanción económica y no por conciencia propia que los conductores de motocicletas deban entender que el uso de casco puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
Es frecuente, dijo, que varios de los infractores sí lleven casco protector, pero lo traen en la mano o colgado del manubrio.