El Hospital General de Tulancingo (HGT) lleva a cabo acciones permanentes para la prevención de padecimientos renales derivados, en su mayoría, de la diabetes e hipertensión arterial.
El titular de esta institución de salud, Arsenio Torres Delgado, explicó que todas las enfermedades influyen una sobre la otra, por lo que este año la reciente conmemoración del Día Mundial del Riñón, 9 de marzo, se enfocó a la obesidad por ser un factor de riesgo para desarrollar dos grandes problemas que pueden dañar a este órgano: la diabetes y la hipertensión arterial.
De acuerdo con la Fundación para la Investigación y Asistencia de la Enfermedad Renal (FINAER), la probabilidad de que se desarrolle este padecimiento en personas obesas, incluidos quienes sufren diabetes e hipertensión, es mayor que en el grueso de la población general.
La FINAER advierte que en 10 años la obesidad afectará a 18 por ciento de los hombres y a 21 por ciento de las mujeres en todo el mundo, por lo que Torres Delgado insistió en la necesidad de adoptar hábitos alimenticios saludables y actividad física.
Sin especificar cifras, definió como frecuente la atención de enfermos renales en el HGT e indicó que en México existe un elevado número de pacientes con enfermedad renal crónica, en etapas avanzadas.
Indicó que el servicio de Urología se activó, prácticamente, a la par de la puesta en marcha del nuevo nosocomio, pero es al área de Medicina Interna donde, regularmente, llegan pacientes con algún daño renal, y que es alta la incidencia en relación con los problemas urológicos, como la litiasis.