Antes de terminar incrustado entre los arboles de un profundo barranco con todo y su familia, un conductor huasteco perdió el control de su automóvil sobre la vía federal México-Tampico.

A punto de caer a más de cuatro metros profundidad, estuvo Sixto Arceta, de 50 años de edad, quien venía conduciendo su Chrysler-Spirit, color verde, a toda velocidad, antes de partirse el pico a la altura de El Cantli.
El conductor viajaba con su esposa y sus dos menores hijos, quienes resultaron ilesos, tras ser valorados por rescatistas denominados los Halcones de Tlanchinol.
Minutos después, arribo una patrulla de la Policía Federal, quien pidió el apoyo de una grúa para sacar del barranco al mini auto.
Cabe destacar que el grupo de rescatistas Halcones de Tlanchinol exhortaron a los vacacionistas a manejar con precaución, debido a que el tramo que comprenden de Ixtlahuaco hacia el lugar conocido como La Virgencita, se encuentra muy resbaloso.