En cuatro ruedas y camionetas adaptadas, los foodtrucks son una alternativa motorizada para vender comida. Estos emprendedores nos platicaron cómo arrancaron sus negocios y cuánto invirtieron en sus cocinas móviles.
Con el sazón
de mamá
Con las recetas de su familia bajo el brazo, Rubens Bertanin y su socia, Mitzi Maldonado, decidieron comprar una Chevrolet Vanette 1998, pintarla en color verde agua y echar a andar Favela Foodtruck, especializado en comi-
da brasileña.
¿Qué caracteriza a un foodtruck?
A diferencia de un restaurante, el contacto con los comensales es muy cercano, lo que facilita hacerse de una clientela frecuente, que, por día, puede alcanzar a hasta 80 personas o 250
por evento.
De Venezuela
con sabor
Luego de trabajar como chef ejecutivo de varios restaurantes, Jorge Udelman decidió comprar una Volkswagen Combi 1982, la adaptó y lanzó Órale Arepa, un servicio de comida venezolana con toque mexicano. Luego de viajes a Puebla, Querétaro, Cuernavaca y Morelia, Órale Arepa se estableció en un local de la Ciudad de México, pero mantienen la van paraervicios en fiestas.
¿Cuál es la ventaja de
un camión?
Los gastos de operación del foodtruck son menores que en un local, donde hasta el 70 por ciento de los ingresos se destina a renta, servicios y pago de meseros. Por ello, el camión es una buena opción para comenzar en el negocio de
la comida.