Elle Fanning ama con todas sus fuerzas la moda, pero si le pusieran una pistola en la cabeza, tiene claro qué elegiría: “Quiero ser actriz por toda la vida”.

De 18 años, la estrella de Super 8 y Maléfica, y hermana menor de Dakota Fanning, contesta de buen humor y con voz suave desde Los Ángeles, su hogar.

El demonio neón, su nueva película, dirigida por Nicolas Winding Refn, es un intento por cambiar esa imagen suya de niña inocente. Además, es su primer papel sexualizado y con escenas subidas de tono.

Encarna a una chica que se adentra en el mundo del modelaje y es objeto de la envidia de sus colegas. No es una película de drama, sino de horror en un escenario de belleza. Y ella es la villana.

-¿Qué significa la belleza para ti?

Es un concepto complejo y es un concepto que es incómodo para las personas, como un tabú. En la generación en la que yo vivo, gracias a los medios, los chicos están aceptando el narcisismo. Estamos viéndonos en la pantalla de nuestros teléfonos todo el tiempo, comparándonos con otros. También es cierto que lo que significa bello es algo menos duradero, menos longevo. Tienes que ser más y más joven para ser bella. Eso espanta. Es el aspecto horroroso de eso.

-¿Eres adicta a las selfies?

No… bueno, sí. Sí me hago selfies. Pero no estoy loca por ellas como algunos amigos.

-Eres una enamorada de la moda… Habla sobre eso…

Sí, amo la moda. Soy muy creativa y me puedo expresar muy bien con la manera en que me visto. Todo depende del clima. Justo ahora hace mucho calor en Los Ángeles, así que me puedes ver con muchos vestidos de verano. Me gusta experimentar. Adoro Gucci ahora. He ido a algunos de sus shows y son sorprendentes. Pero para comprar soy también de ir a tiendas con cosas vintage. Me gusta mezclar prendas nuevas con viejas.

-¿Hay alguien a quien quisieras parecerte en estilo?

Siempre he admirado a Marilyn Monroe desde que era pequeña. No sólo era absolutamente hermosa sino que todo le quedaba increíble.

-¿Te adentrarías de lleno en el modelaje?

Nunca he desfilado por una pasarela o algo similar. Sería divertido. Me gustaría. Aunque no creo que sea buena para eso. Además creo que ese mundo, el de la moda, es un poco cerrado. Creo definitivamente que lo mío es actuar. Mi profesión es un poco pariente de la moda. A veces hago sesiones de fotos y lo disfruto mucho. Pero lo veo como actuar de cierta manera porque tienes que interpretar un personaje y sentirte ese alguien dependiendo la ropa que traigas puesta.

-Acabas de terminar preparatoria. ¿Cómo fue tu graduación?

Loquísima, porque la celebré en el Festival de Cannes. Mis amigos volaron a Cannes a la premier de El demonio neón.

-¿Estás lista para la universidad?

No iré a la universidad este año, creo que no sería justo porque tengo muchos proyectos actorales y faltaría mucho a clases. Creo que no estoy lista aún para ir.

-Tu última película es la más madura que has hecho. ¿Qué personajes te interesan ahora?

Es difícil decir qué tipo de papeles persigo. Pero cuando lees ciertos guiones, sientes que quieres hacer ese o aquel personaje. Puede ser una comedia o drama. Estoy creciendo, así que quizás suene tonto, pero quiero hacer a mujeres jóvenes, no chiquillas, adolescentes. Eso me emociona. Sería mi siguiente capítulo.

-¿Algún director mexicano en tus planes?

Cuando era chiquita, trabajé con Alejandro González Iñárritu en Babel. La historia de mi personaje ocurría en Tijuana, y filmamos en el desierto. Amaría repetir con él.