· 
Hace (62) meses
Amor romántico
Compartir:

Hoy que es el día de la entrega de los premios Oscar en Hollywood, vamos a hablar de algo en lo que las películas más exitosas en la historia han contribuido: al romanticismo en el amor.

Desde las princesas, las novelas rosas, inclusive muchas de las novelas que se han transmitido aquí en México siempre han puesto el amor como algo romántico. No sé si muchos de ustedes se acuerden de una película llamada Love story, un filme precioso, que a muchas mujeres, y hasta hombres, les ha hecho llorar por ese sentimiento impregnado en la película, y hoy vamos a intentar explicar un poco los mitos de lo que es el amor romántico.

Uno de los mitos, o la otra cara del amor, sería, el más famoso, el de la media naranja. Yo creo que Dios, cuando creó al mundo, partió limas, limones, naranjas, toronjas y se revolvió tanto que a lo mejor para encontrar a tu media naranja tendrías que recorrer todo el mundo. No existe. Existen las parejas bien adheridas, las parejas que tienen uniones, pero la media naranja como tal, pura, no existe. Y muchas veces decimos “estoy esperando a mi media naranja”, y pues te quedarás sentado esperando, porque será muy complicado hallarla.

Otro de los mitos, que ya lo hemos hablado, son los celos. ¿Cuánta gente cree que los celos son signo de amor o son indispensables? Esto es un total mito y, además, una enfermedad que genera más problemas de los que resuelve.

La equivalencia: pensar que el amor y el enamoramiento son iguales, y que si una persona deja de sentirse apasionada-enamorada es mejor terminar la relación, y yo creo que no. Como lo decía en el artículo anterior, el enamoramiento, como un efecto hormonal, se genera en el cerebro y puede durar de uno a tres años, ahí se termina, y si nosotros pensamos que el amor va a durar toda la vida, estamos equivocados, lo que dura toda la vida son otros intereses que puede haber dentro de la pareja, otras metas, deseos, familia, miles de cosas que tu puedes compartir con la pareja y así ir reafirmando los lazos de una forma más sólida y a largo plazo.

Aprender a amar es una de tarea pendiente que tenemos la mayoría de las personas; no sabemos amar, culturalmente se nos han dado una serie de valores distorsionados y uno de ellos es, precisamente, el amor romántico.

Con frecuencia me topo con mucha gente que no se siente capaz de poner fin a una relación tóxica por el temor al abandono, a la pérdida, a no aceptar una ruptura ante la sociedad; nos hemos vuelto muy de cara hacia afuera, pero de cara hacia adentro estamos fatal y eso realmente nos lleva a que una relación de pareja no dure, y una vez que pase el efecto “dopamina”, como le llamamos, comiencen los problemas.

Yo creo que una relación de pareja necesita algo más que cariño, debe fundamentarse en el respeto, en la sinceridad, en la empatía, la sensibilidad, en otras palabras, cambiar los conceptos de rigidez sobre la pareja, donde uno tiene que dar y el otro recibir, o uno es la víctima y el otro es el malo, una relación es de dos y hay muchas cosas dentro de la pareja que tenemos que resaltar y otras, eliminar; muchas veces el amor y la dependencia los vinculamos y no deberían estarlo, ya que la independencia no implica indiferencia o despreocupación, sino una manera sana de relacionarse, pero la palabra libertad en una relación de pareja, a veces nos asusta y por eso censuramos y queremos tener controlada a la otra persona y es por esto que muchas parejas terminan.

Amar desde la independencia, y esto léanlo dos veces, amar desde la independencia, desde la libertad es amar sin obligación, sin daño, sin miedo, simplemente amamos con ternura.

Piensen y reflexionen un poco para no ser una pareja con dependencia afectiva, que ahí es donde podemos caer, no tengan los comportamientos que ya mencionamos (celos, ataques de ira, conductas obsesivas, agresiones físicas o verbales) porque llega un momento en que esto se sale de control, aprendan a soltar a la pareja: si los quiere, estará con ustedes y si no, de cualquier forma se va a ir, ¿para qué se empeñan en tenerlos ahí pegados?

Debajo de los comportamientos que hemos descrito, hay siempre algunos de los paradigmas que tenemos gracias a la sociedad, inclusive que nos heredan, ya sea la familia, los amigos, etc. Uno de ellos es el miedo al abandono, el hecho de estar solo nos hace muchas veces decir “prefiero mantener a mi pareja conmigo aunque sea lo que sea, a estar solo”, otro es la necesidad de sentirse protegido, de ver a la pareja como alguien más fuerte que tú mismo y que te protege de lo malo en el mundo; cuánta gente vemos que dice “sin mi pareja no puedo hacer nada”, generalmente estamos hablando de personas débiles e indefensas y que, al final, ese camino las conduce a la dependencia y entonces permite que las pisoteen y les pasen por encima.

Otro es la necesidad de sentirse querido, el orden de los factores debería ser amarme para amar, pero en este tipo de personas es sentirme querido para valorarme: si me quieren me valoro, si no me quieren no me valoro y estas personas son montañas rusas, un día las puedes ver en la cima de lo bien que están y otro día, hundidas, incluso en depresión.

Entonces, en una relación saludable, queridos amigos y amigas, deben de darse dos elementos, y es lo básico que debemos entender: amor y respeto; si alguno de ellos falta en tu relación, estás con la persona equivocada.

Si no hay amor y respeto, no hay una relación a largo plazo; habrá atracción, incluso romanticismo, pero nunca será una verdadera relación y, mucho menos, saludable; recuerda que quererte y cuidarte te hace libre, siendo libre puedes amar de una forma saludable.

Y por último, ya para terminar, esperando que vean una película, especialmente de romanticismo, para que observen lo que es, y ya con este último artículo porque ya finalizamos con el mes del amor y la amistad, el amor romántico, siempre nos va a llevar a tópicos de como creer que una persona nos puede llevar a colmar nuestras expectativas de vida; eso es lo que nos enseñan las películas, nos llenan todos nuestros anhelos internos, nos llena el vaso y, la verdad, créanmelo, nada está más lejos de la realidad que pensar que el amor romántico nos va a llevar a algo concreto y de por vida. Nadie puede hacer feliz a alguien que no es feliz por sí mismo, recuérdenlo siempre que estén con alguien; si tú no eres feliz, ¿entonces cómo puedes ser feliz con otra persona?, ¿cómo puedes permitir que otra persona te quiera si tú mismo no te das la oportunidad de quererte? El amor romántico es tan exigente que es difícil estar a la altura de estas expectativas de perfección, porque constantemente tienes que estar en una perfección.

Perdóname, querido lector, por tumbar todas estas ideas del romanticismo, es bueno ser romántico en el matrimonio, en el noviazgo, pero hay que ponerlo en su justa dimensión, no creyendo que lo es todo en la vida; muchas personas cometen el error de terminar con su pareja únicamente porque ya no sienten esas mariposas en el estómago.

Véanlo en su justa dimensión y pongamos un poco de romanticismo en la vida, yo espero que esto encienda un poco la relación de las parejas y realmente le pongan romanticismo a su relación, así la relación prevalecerá por mucho tiempo.

A partir de marzo comenzamos con nuevos artículos, algunos de salud, ahora que viene la primavera. Escríbanme si quieren algún tema en específico.

Les deseo larga vida, salud y prosperidad.

 

 

Alberto Tristany Zarauza

Compartir:
Etiquetas:
Relacionados
title
Hace 0 minutos
title
Hace 1 hora
title
Hace 1 hora
title
Hace 1 hora

© Copyright 2023, Derechos reservados | Grupo Criterio | Política de privacidad