· 
Hace (65) meses
EMOCIONES Inteligencia Emocional (2da Parte)
Compartir:

Hoy quiero compartirles cómo la Inteligencia Emocional puede ser una llave para abrir las puertas “cerradas” de la felicidad.

Puesto que todos pasamos por momentos de gran complejidad emocional, nada mejor que alzarnos como hábiles gestores en el mundo de los sentimientos, “las emociones pueden llegar a ser nuestra mejor fortaleza”, o por el contrario nuestra mayor debilidad, todo depende de cómo utilicemos nuestras realidades particulares.

Algo que debemos tener muy en cuenta es que, sentimientos como la tristeza, el miedo, la rabia no son tan negativas como a veces creemos o pensamos, son al fin y al cabo toques de atención que nos avisan que hay algo que va mal; son, esa luz de alerta ante la cual hay que saber reaccionar, gestionar y transformar sin permitir que nos dominen por completo, como a veces suele pasar.

 

El autoconocimiento

Esta primera estrategia puede parecer a simple vista demasiado sencilla, no obstante si realizas los siguientes ejercicios que hoy te propongo, te darás cuenta de que en ocasiones lo que creemos que somos no corresponde con lo que hacemos cada día.

Piensa durante unos momentos en estas emociones; utiliza seis palabras que te definan a ti mismo y a continuación pon ejemplos que demuestren que verdaderamente eres de este modo,

por ejemplo:

  • Yo soy valiente, la pregunta que tienes que hacerte es ¿lo puedo demostrar?

Respuesta: No, porque hasta el momento estoy supeditado a lo que los demás decidan o me digan.

  • Yo soy una persona positiva, ¿lo puedo demostrar? No, porque ahora mismo las cosas no me van bien y he dejado de ver el lado positivo de la vida.
  • Yo soy afectuoso, ¿lo puedo demostrar? No, porque ahora me siento mal conmigo mismo y no puedo mostrarme cariñoso con los demás como lo era antes.

Ahora que ya te has definido, vamos a escribir el cómo nos gustaría

estar en estos momentos, muchos podrán escribir: me gustaría sentirme tranquilo, me gustaría estar bien conmigo mismo, escribe lo que tú quieras y entiende la diferencia entre cada estado y reflexiona sobre ello, sobre lo que sientes ahora y cómo quieres estar en realidad, porque son situaciones completamente diferentes.

Eres responsable de tu debilidad y por ende debemos dejar de culpar a otros de lo que nos falta para ser felices. La Inteligencia Emocional nos enseña, ante todo, a ser responsables de nosotros mismos, conociendo nuestras virtudes, nuestras necesidades y nuestros miedos.

Puesto que todos debemos ser responsables de nuestra felicidad es necesario tomar decisiones:

  • Si te hacen daño, defiéndete con asertividad y deja claro dónde están los límites.
  • Expresa con claridad tus emociones y tus sentimientos.

Si las otras personas no actúan con correspondencia, con respeto y con afecto, será necesario tomar una decisión. Y esto es súper importante porque en realidad nosotros debemos estar muy bien, partimos de la base de que para que los otros estén bien nosotros debemos estar mejor y esto se logra a partir de acciones

y decisiones, por ello te recomiendo que:

  • No culpabilices a nadie
  • No almacenes rencores
  • No guardes rabia ni despecho

Todo ello pesa demasiado en nuestro corazón, la Inteligencia Emocional nos enseña que para estar bien, debemos ser libres de estas emociones, que lo queramos o no, pueden enfermarnos y hacernos sentir mal.

 

En resumen:

“Tú decides lo que vales”, no tienes que demostrarle nada a nadie, esto es un principio que muchas veces se nos olvida, ya que siempre estamos luchando por ganarnos el reconocimiento externo y esto no siempre va a llegar por que nosotros no tenemos que demostrar nada, al único al que le tienes que demostrar algo, es a ti mismo, que puedes, que vales y que eres el mejor. Llegado a este momento ya somos plenamente conscientes de nuestras emociones, de nuestras necesidades y sabemos también que debemos ser asertivos, que es necesario poner límites y dejar claro qué es lo que vamos a permitir y qué no, reconociendo tus virtudes y tus puntos fuertes. No más dudas, no más miedo. Mientras exista el respeto todos tenemos derecho a ser y dejar ser.

La próxima semana veremos cómo manejar nuestras emociones y como liberarlas, esto nos permitirá trabajar tres áreas esenciales de la Inteligencia Emocional que son:

 

  • Percepción, habilidad de reconocer diferentes emociones.
  • Comprensión, habilidad para identificar las causas y consecuencias de las emociones.
  • Regulación, habilidad para manejar efectivamente lo que sientes y sienten los demás. Para ello tienes que identificar y conocer tus propias emociones.

Por eso, esta semana te invito a que te dediques a pensar, a analizar, a escribir cuáles son tus emociones, a identificarlas, en qué momento salen, porqué salen y con quién salen y a partir de aquí comenzaras a tener el control de TU VIDA.

Si deseas ahondar en las siempre interesantes y útiles teorías sobre la Inteligencia Emocional, escríbeme y con gusto te recomiendo algunos de los libros que hay acerca del tema, para emprender ese cambio personal, con el que serás más feliz, más productivo  en cada uno de sus campos, ya sea laboral, personal,  familiar o afectivo.

O bien continúa leyéndonos cada semana, para aprender técnicas que irán mejorando tu entorno y tu vida.

 

 

Alberto Tristany Zarauza

Compartir:
Etiquetas:
Relacionados
title
Hace 48 minutos
title
Hace 2 horas
title
Hace 2 horas

© Copyright 2023, Derechos reservados | Grupo Criterio | Política de privacidad