Neptuno en Pachuca
 
Hace (75) meses
 · 
Compartir:

Una escultura del dios Neptuno, que debería formar parte del patrimonio artístico del estado de Hidalgo, permanece desde hace varias décadas en el pequeño jardín del edificio Márquez, cuyos actuales dueños ignoran, posiblemente, la procedencia original de la figura mitológica.

Sin ánimo de tratar de imitar al cronista del centro histórico de la ciudad, arquitecto Luis Alberto Corrales Vivar y Cravioto, y a la cronista de Pachuca, licenciada en biblioteconomía Sara Montes Romero, voy a contarles una historia.

La casona levantada en la calle de Bravo 202, sede del Foro Cultural Efrén Rebolledo, fue residencia del general Rafael Cravioto, que junto con sus hermanos Simón y Pompeyo, gobernaron al estado de Hidalgo a partir de 1875. Los tres, construyeron en un periodo de veinte años verdaderos palacetes en medio de una ciudad empobrecida por la explotación de los ricos mineros criollos.


El poderío político del general Rafael Cravioto y sus hermanos declinó abruptamente en 1897. Tras sus muertes, las suntuosas residencias fueron vendidas por sus descendientes en distintas épocas. Una, ubicada en la esquina de Guerrero y Bravo, otra en las calles de Hidalgo—actual Archivo General del Estado–, una más en la calle de Zaragoza, propiedad del arquitecto Luis Alberto Corrales Vivar y Cravioto.

La casona de la segunda calle de Bravo 202 fue utilizada para usos varios. En 1940 albergó las oficinas y consultorios de los Servicios Coordinados de Salubridad.

Entre los detalles de la antigua residencia había pequeña área ajardinada protegida por barandales de buena forja, una fuente y en el centro la escultura, réplica del dios Neptuno, completa con el mítico tridente.

LA SECUNDARIA OFICIAL

En la década de 1950, el edificio fue habilitado con aulas para la Secundaria Oficial de Pachuca, única de su tipo en la ciudad. Posteriormente, en el régimen del gobernador Sánchez Vite (1963-1969) se destinó como sede de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, luego para la dirección de Enseñanza Audiovisual ).

En esos años desaparecieron la fuente y la escultura del Neptuno que adornaban el patio central.

A partir de 1982, el gobierno de Guillermo Rossell de la Lama inició una serie de obras que cambiaron, para bien o para mal, la fisonomía de la ciudad y el destino de distintos sitios y edificios. La antigua mansión del general Rafael Cravioto la adaptaron para salas de exposición artística y convertido en Foro Cultural Efrén Rebolledo, base, además, del Centro Hidalguense de Investigaciones Históricas, A. C. (Cehinac), que dirigió el historiador Arturo Herrera Cabañas, quien falleció en un accidente aéreo, en Huejutla, en abril de l994.

REAPARECE EL NEPTUNO

La memoria de algunas personas dio pista que condujo a la reaparición de la estatua del mítico Neptuno. Fue colocada en pequeño pedestal en el centro del reducido patio del consultorio, que forma parte del enorme edificio del doctor Andrés Márquez, situado en las calles de Arizpe.

El doctor Márquez, connotado catedrático de la Escuela de Medicina de la Universidad Autónoma de Hidalgo y prestigioso cirujano, prestó servicios en la famosa Clínica Mayo, de Houston, Texas.
La escultura del edificio Márquez es la misma que adornaba la vieja casona del exgobernador Cravioto, sólo que mutilada; le faltaba un brazo y el tridente.

En la revista Cero, editada en 1980, que dirigía Roberto Meza, se publicó el hallazgo y la correspondiente petición para que la escultura fuera entregada a las autoridades.

En 1984, el señor José Luis Guzmán, director entonces del Foro Efrén Rebolledo, enterado del reclamo periodístico, se entrevistó con el doctor Andrés Márquez, y lo puso al tanto del asunto.
El ameritado catedrático decidió reintegrar la escultura a su sitio original, como una “donación”.

José Luis Guzmán Valdés (hijo del poeta Genaro Guzmán Mayer), explicó que el connotado cirujano dio a conocer que la estatua la compró a una señora, cuyo nombre desconocía, quien la tenía arrumbada junto con otras piezas de la bella fuente del antiguo edificio.

Y EL TIEMPO PASA…

Transcurrieron más de 20 años de la entrevista que sostuvieron José Luis Guzmán y don Andrés Márquez y no se logró concretar la entrega de la estatua. El médico falleció poco después.
En el año 2004, sólo quedaba como recurso que el Consejo Estatal para la Cultura y las Artes, que presidía la licenciada Lourdes Parga Mateos, realizara los trámites correspondientes para que esa pieza, considerada patrimonio del estado, pasara a manos de la autoridad oficial pertinente.

Sin embargo, nada se hizo; nada se movió.

Los descendientes del doctor Márquez mantienen la escultura en el pedestal, asegurada con gruesas cadenas que guardan doble símbolo: las cadenas del olvido y las cadenas de la indiferencia.
La escultura del Neptuno no se ha perdido, pero el no restituirla a su sitio original habla de lo mucho que se ha desaprovechado en nuestra ciudad capital.

Durante el régimen del gobernador Guillermo Rossell fueron eliminados los vestigios mineros de las haciendas La Unión y La Luz con la apertura de la prolongación de la avenida Revolución.
El primer edificio del poder ejecutivo del estado, situado en las calles Venustiano Carranza, frente a Las Cajas Reales; la vieja Inspección General de Policía.

Aun cuando permanece en pie, el viejo palacio de gobierno de la plaza Constitución, sin utilidad, que fue allanado por la pandilla de rufianes del Perro Pelcastre, y que debería ser asiento de actividades culturales.

Compartir:
Etiquetas:
Relacionados
title
Hace 2 horas
title
Hace 2 horas
title
Hace 2 horas
title
Hace 3 horas
Se dice
/seDiceGift.png
Especiales Criterio
/transformacion.jpeg
Suscribete
/suscribete.jpg
Más popular
Política actual impide el desarrollo: Marivel Solís
Por Gerardo Ávila . 24 de mayo de 2016
Por Gerardo Ávila . 9 de agosto de 2017
Por Federico Escamilla . 12 de febrero de 2018
Por Gerardo Ávila . 30 de noviembre de 2015

© Copyright 2023, Derechos reservados | Grupo Criterio | Política de privacidad