Presa sexenal
 
Hace (88) meses
 · 
Compartir:

“Yo declaro que la justicia no es otra cosa que la conveniencia del más fuerte.”

Platón

 

La maestra Elba Esther Gordillo parece una presa política sexenal, encarcelada no por los delitos que haya cometido, que quizá existen, sino porque resultaba incómoda para el gobierno en turno.

No tengo duda que la maestra se enriqueció a costa del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación y de los maestros del país. La organización magisterial parece haberle dado recursos para adquirir inmuebles en México y San Diego, además de pagarle gastos suntuarios de carácter personal; pero las acusaciones formales en su contra no están prosperando.

Un tribunal de amparo ha desechado ya una, por defraudación fiscal, pero hay razones para pensar que será exonerada de las demás. Si esto ocurre, la maestra quedará para la historia como una presa política más, encarcelada no por las faltas que pudiera haber cometido, sino por haberse opuesto a la reforma educativa.

El Primer Tribunal Colegiado Penal de la Ciudad de México le ha concedido a la maestra Gordillo un amparo que la libera de la acusación de defraudación fiscal por 4.4 millones de pesos. El fallo no fue producto de que no hubiera pruebas del presunto delito, sino de una violación del debido proceso. El Sistema de Administración Tributaria no conminó a la líder a declarar el ingreso antes de presentar la acusación penal, ni la PGR le informó que estaba realizando una averiguación por este caso. No se le permitió, en pocas palabras, preparar una defensa. Además, el caso se siguió a través de la SEIDO y no de la autoridad fiscal. No se trató a Elba Esther como a otros evasores.

La maestra tiene otra acusación de defraudación fiscal por 2.2 millones de pesos, pero al parecer padece de los mismos defectos de origen. Esto dejará solamente dos acusaciones en su contra: una por operaciones con recursos de procedencia ilícita y otra por delincuencia organizada.

La primera de las acusaciones, un supuesto lavado de dinero, es por haber realizado gastos personales con dinero del sindicato. El problema es que el SNTE no ha presentado denuncia por robo o desvío de recursos. Si el sindicato no lo denuncia, entonces los recursos le fueron entregados lícitamente a la maestra, aunque debieron ser considerados como un ingreso adicional a su sueldo por el que debía pagar impuestos.

La acusación por delincuencia organizada, pese a todas las implicaciones emocionales de la expresión, no significa más que el presunto delito principal fue cometido por tres personas o más. Si la acusación por operaciones con recursos de procedencia ilícita cae por tierra, la de delincuencia organizada se desvanecerá de manera automática.

Como van las cosas es probable que la maestra Elba Esther, que hoy enfrenta los procesos en prisión domiciliaria, sea declarada inocente por los tribunales a fines de este sexenio o principios del siguiente. Las autoridades proclamarán que hicieron todo lo posible por lograr la condena de una criminal, pero de poco servirá. Parece claro que la maestra obtuvo dinero de forma irregular del sindicato y que los maestros deberían denunciar ese mal uso de sus recursos. Sin embargo, la falta de denuncia nulifica los esfuerzos por mantenerla en la cárcel por ese delito.

¿No supo la PGR cómo comprobar las faltas de la maestra o la única preocupación del gobierno era quitarla de en medio mientras se aprobaba la reforma educativa? Cualquiera de los dos casos preocupa. Por lo pronto Elba Esther parece destinada a quedar en la historia como uno más de esos presos políticos sexenales tan comunes en México.

 

Cetes y riesgo

Los Cetes tuvieron una fuerte subida de 0.75 por ciento en la subasta de ayer. El riesgo de la deuda mexicana crece como consecuencia de la elección de Donald Trump en Estados Unidos. 

Compartir:
Etiquetas:
Relacionados
Se dice
/seDiceGift.png
Especiales Criterio
/transformacion.jpeg
Suscribete
/suscribete.jpg
Más popular
Política actual impide el desarrollo: Marivel Solís
Por Gerardo Ávila . 24 de mayo de 2016
Por Gerardo Ávila . 30 de noviembre de 2015
Por Gerardo Ávila . 9 de agosto de 2017
Por Federico Escamilla . 12 de febrero de 2018

© Copyright 2023, Derechos reservados | Grupo Criterio | Política de privacidad