Cada día ingresan ilegalmente a México, en promedio, 2 mil armas de fuego procedentes de Estados Unidos, señaló el titular de la Comisión Nacional de Seguridad (CNS), Renato Sales.

Al participar en un foro el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM advirtió que ese tráfico ilegal alimenta el poder letal de las organizaciones delictivas.

“La mayor parte de sus armerías (de origen) se concentran en los cuatro estados fronterizos con nuestro país, California, Arizona, Nuevo México y principalmente Texas”, apuntó.

“Es una realidad que muchas de las armas que ahí se venden, en Estados Unidos, terminan en manos de delincuentes que operan en territorio mexicano”.

Sales señaló que el Gobierno federal ha planteado a Estados Unidos la creación de un Grupo de Fusión Binacional sobre ese fenómeno.

Con dicho grupo, abundó, el FBI y la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas y Explosivos (ATF, por sus siglas en inglés) compartirían información de inteligencia con la Procuraduría General de la República (PGR) y la Policía Federal para tomar decisiones ágiles.

“Es una propuesta que México ha subido a la mayor parte de las reuniones bilaterales, es una propuesta que está en curso y que seguramente será retomada por la próxima Administración”, indicó.

“Nos pide Estados Unidos que apoyemos en política migratoria, como ahora claramente vemos, y nosotros les pedimos en cambio que nos apoyen con la política de armas. El apoyo a la fecha no es suficiente”.

El titular de la CNS comentó que en EU es muchísimo más sencillo comprar una arma larga que un jarabe para la tos.

“Para comprar un jarabe para la tos se requiere de receta médica, para comprar un arma larga no se requiere absolutamente nada”, señaló.

El funcionario se pronunció nuevamente por modificar la Constitución y la ley para imponer prisión preventiva oficiosa al delito de portación ilegal de armas de fuego.

Antonio Baranda
Agencia Reforma