Comer en un lugar como Mineral del Chico es un apapacho al paladar, sobre todo cuando los productos como trucha y frutos son de la misma región. Lo mejor: tú mismo puedes pescar y cortar los dulces alimentos que  vas a consumir.

Para hacerlo, un servicio turístico es el gastro-recorrido para grupos de doce personas. En él harás una visita al criadero de truchas, y cortarás las hierbas de olor y los frutos que utilizarás.

El paso siguiente es una clase in situ, donde el chef David Castillo, de La Trucha Grilla, te enseñará a desespinar las truchas, marinarlas y ponerlas a las brasas, para consumirlar como plato fuerte que acompañarás con una ensalada de flores y frutos.

Es una experiencia especial porque no se compara con ir a comprar el producto en el supermercado y llevarlo a la cocina, sino qué elementos utilizar, desde cortar la manzana de un árbol, o tomar el epazote o perejil desde la tierra misma.