Hoy, hace 50 años, Pachuca lograba un glorioso capítulo en su historia al conseguir su primer ascenso a primera división del futbol mexicano. Fue el 5 de marzo de 1967 cuando los Tuzos consiguieron este gran logro en el estadio Revolución Mexicana.
La casa de los hidalguenses fue
sede del último partido del torneo 1966-1967 en el que se definiría al campeón, ya que los Tuzos eran líderes del torneo, pero el
cuadro de Laguna estaba un punto abajo de ellos.
Los blanquiazules recibían en casa al Ciudad Victoria, único equipo que le había podido ganar a Pachuca durante toda la
temporada, en la que ese descalabro fue el único que tuvieron. La ciudad era una fiesta esperando ver el triunfo de su equipo.
Ernesto Chueco Candía era el técnico de ese equipo que escribiría historia aquel mediodía, en el que más de ocho mil aficionados llenaron las tribunas del Revolución.
Ese apoyo rindió frutos rápidamente, ya que Alberto Pollo Castillo abrió el marcador al minuto ocho del duelo, haciendo explotar la algarabía en el inmueble. Esa ventaja la ampliarían casi al final del primer tiempo, cuando Francisco Arredondo convirtió el
segundo tanto.
Con el ánimo a tope, para la segunda mitad los Tuzos
recibieron fuerte presión de Ciudad Victoria, pero supieron aguantar para coronarse campeones de la segunda división y conseguir así el ascenso a la primera división.
Así fue aquel capítulo que marcaba un parteaguas en la historia de Pachuca, club que había sufrido desapariciones del equipo y que desde ahí vivió de forma diferente su existencia, hasta llegar a las glorias conseguidas en los últimos 20 años, convirtiéndose en un equipo importante de la Liga MX.