Si Inglaterra se corona en Rusia 2018, parte del éxito se le podría conceder al técnico Josep Guardiola.

Así como ocurrió con los títulos de España en 2010 y Alemania en 2014, atribuidos en cierta medida al impacto de Pep con el Barcelona y Bayern Múnich, esta vez la historia se repite con el
Manchester City.

En aquellas ocasiones, estos clubes aportaron seis titulares cada uno en cada final.

Ahora, tres jugadores de Guardiola con el monarca de la Premier League inglesa, Manchester City, son fijos en la selección inglesa: Raheem Sterling, John Stones y Kyle Walker.

Además, el DT del representativo de los Tres Leones, Gareth Southgate, también pone énfasis en la posesión del balón e insiste en que sus zagueros y el arquero Jordan Pickford salgan con pelota dominada desde atrás, justo como Guardiola ha exigido por años.

Ese estilo de juego se ha reflejado en una selección renovada y ambiciosa, que llegó a semifinales tras 28 años de ausencia, luego de hacerlo por última vez en 1990.

Y quizá indirectamente Guardiola tuvo que ver con eso.

Guardiola conversa mucho con Stones durante los encuentros del City y lo ha transformado en un jugador más completo.

“Si hablamos del efecto Pep, definitivamente nos ha influenciado a los chicos que venimos del City, y nosotros tratamos de aportar lo que hemos aprendido al equipo de Inglaterra”, dijo Stones.

“Traemos una idea fresca, no a todo el juego en sí, pero en ciertos aspectos. Todo mundo lo hace de sus equipos y entrenadores, creo que por eso tenemos una gran combinación de jugadores”.

De igual manera, Walker se ha convertido en un lateral derecho mucho más versátil, luego de jugar por un año bajo el mando de Guardiola, mientras que Sterling viene de su temporada más prolífica, anotando 23 goles en todas las competencias en su rol como delantero interior.

Staff I Agencia Reforma