Al conocer de cerca el estadio, el museo y tras haber firmado su contrato como nuevo jugador del Guadalajara, Jesús Molina dimensionó el tamaño de empresa que tendrá su carrera a partir de ahora.

“Es un reto grandísimo. Sé lo que significa el estar en un club tan grande como lo es Chivas, vengo con el compromiso y con la ilusión de hacer las cosas muy bien. Es un reto muy importante para mi carrera, creo que será un parteaguas para seguir creciendo como futbolista”, declaró en una entrevista institucional difundida en las redes de los rojiblancos.

Molina llega al chiverío en compra definitiva, para firmar un contrato de 3 años como rojiblanco, en el que será su quinto equipo en la primera división.

“Por lo que me han contado compañeros que están actualmente en el equipo, sé lo que se vive, sé de su afición y, bueno, de mi parte es entregarme al cien por ciento, yo creo que lo único que no es negociable es la actitud y creo que lo mínimo que pueden esperar de mí es eso”, agregó el volante sonorense.

Después de haber debutado con los Tigres en el 2008, Molina fue dos veces campeón de liga con el América en el Clausura 2013 y en el Apertura 2014. Para el 2015 también levantó otro trofeo de liga con el Santos de Torreón, antes de pasar a los Rayados en donde jugó los últimos dos años.

Ahora el espigado mediocampista llega al Rebaño para cubrir la falta de líderes en el grupo, ya que ante la salida de Carlos Salcido y Edwin Hernández, solo Jair Pereira e Isaac Brizuela cumplan con el perfil de experimentados e influyentes sobre el resto para la competencia.

Con Molina, Chivas cerró sus contrataciones con cinco futbolistas: Dieter Villapaldo, Hiram Mier, Luis Madrigal y Alexis Vega, más el regreso de Carlos Cisneros.

Ramón Estrada I Agencia Reforma