Miguel puede perder todos los 11 partidos que le restan al Ameee, quedarse con nueve puntos, y su chamba la tiene asegurada.

Esa frase la conocemos mucho en el caso del señor Ricardo Ferretti de Oliveira. No que él la diga, sino que se sabe perfectamente en Monterrey que primero se se pueden ir todos, incluso M. André-Pierre Cristian Gignac, y después el Tuca.
Bueno, pues hay otro así, y se llama Miguel Ernesto Herrera Aguirre.

“Éste es el club grande de México y no nos permitimos perder partidos seguidos, mucho menos no clasificar. Ya el título depende de circunstancias.

“Pero con el Piojo no se mueve (así me escribió por Whats. Imagino que quiso decir que no se va). Es más, puede perder los que restan y él sigue”, me comentó ayer un Judas Águila que era muy allegado a Yon de Luisa, cuando éste era el bueno en el América, no hace muchos meses.

Y no es que se esté hablando de eso en el Nido. Para nada. Lo que me quiso decir es que tal vez después de Ferretti, el DT en México más seguro en su plantel es el hijo de la señora Aguirre.

Yo le agregaría a un tercero, abajo de ellos dos: Diego Martín Alonso López, y no porque tenga dominado al grupo y encantada a la afición Rayada, sino porque es la apuesta máxima del presidente Duilio César Jean Pierre Davino Rodríguez.

PD: Miguel, (casi) tan firme en el Ameee como el Tuca en Tigres

¿Y a Pumas?
¡Aaah, caray! De pronto, y como buen México que somos, se culpó y sancionó a alguien que el castigo -atacado de la risa- se lo pasará por la pista de tartán de CU.

La Liga MX se quedó muy tranquila con el rosario de explicaciones que le dio el club Universidad sobre el pseudo fotógrafo que el domingo pasado se dedicó a agredir verbalmente a los jugadores del América y al técnico Miguel Ernesto Herrera Aguirre.

Pumas sólo dio un escueto comunicado donde afirman que Juan Carlos Castro se ostentó como integrante de una agencia internacional. Con eso se curaron en salud.

Mal de parte de los universitarios al no haber señalado y denunciado abiertamente quién les vio la cara, porque por la tarde corrió el rumor que el personaje en cuestión se había identificado como personal de la agencia Reuters y de inmediato salió la gente de este medio a negarlo y a pedir claridad.

¿Que lo castigaron con un año de sanción para que no se vuelva a parar en el Olímpico Universitario?, pues sí, pero al señor Castro, que es gerente de ventas y labora para una empresa de telefonía móvil, eso ni le afecta.

¿Por qué?, pues porque no trabaja para algún medio de comunicación. De seguro está en su casa risa y risa, enseñándole a todos sus amigos las fotos que tomó para su egoteca personal y el video en el que provocó la ira del timonel azulcrema, que ya ven que casi no se prende.

¿Y Pumas?

Hablé con un Judas de la FMF. No el habitual de la Liga MX, pero también de vez en cuando le echo una llamada a éste.

“¡Qué quieres que te diga…!”, me dijo, para luego explicarme:

“Aquí es ‘lo que menos nos perjudiquemos los del gremio’”

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PD: ¿Cómo era aquello?, ah, sí: “¡Viva México, cabrones!”.

San Cadilla