Los Tuzos no pudieron evitar el fracaso: se terminó el Clausura 2018 y acumularon su tercer torneo consecutivo sin entrar a la liguilla. Sucedió lo inevitable, Pumas empató con Querétaro y terminó con cualquier esperanza que tenía Pachuca de meterse a la fiesta grande; no hubo milagro en CU y los hidalguenses fueron eliminados.

Solamente un punto le faltó al cuadro blanquiazul para meterse entre los ocho primeros de la tabla general, pero luego de una gran reacción del equipo, al vencer por goleada a Puebla y Santos, no mantuvieron el buen paso y en las últimas dos jornadas empataron sin goles, ante dos rivales que parecían a modo (Gallos y Atlas) y de nueva cuenta verán la lucha por el título por TV.

En junio del 2017, al inicio del año futbolístico, el presidente del Club Pachuca, Jesús Martínez, dijo que tenían el mejor plantel de su historia y que esperaba obtener resultados a la altura de lo que se había invertido; sin embargo, las cosas no fueron así y, al mando de Diego Alonso, han tenido una temporada de pesadilla.

Una de las pocas cosas rescatables que tuvieron los hidalguenses en este semestre fue el gran nivel que mostró Keisuke Honda, quien no solamente fue uno de los futbolistas más destacados de su equipo, sino de toda la Liga MX, anotando siete goles y dando siete asistencias.

Sin duda, los refuerzos quedaron a deber en general; Christian Giménez, Dairon Mosquera y Walter González apenas vieron minutos en el certamen, mientras que el africano Kekuta Manneh no debutó en liga.

Mientras que el único que tuvo una buena participación fue Sebastián Palacios, El Tucu se ganó la titularidad en la parte final y le alcanzó para convertir siete goles, para ser, junto con Honda, los mejores goleadores del Pachuca.

Se espera que Diego Alonso se reúna con la directiva de los Tuzos, para decidir si continúa o no al frente del primer equipo, pero luce muy complicado que, luego de los resultados recientes, se quede al frente de la escuadra hidalguense.

Marco Iván Patiño I Pachuca