A José Manuel de la Torre se le fue de las manos la negociación con el Toluca, y seguramente a estas alturas de la fiesta debe estar dándose de topes contra la pared más cercana porque seguramente pensó que en medio de la desesperación de los Diablos Rojos, no tenían a otros candidatos para tomar el puesto de técnico del que echaron a Hernán Cristante.
Mi Juditas Colorado me contó a detalle cómo el Chepo hizo campaña por debajo del agua para volver al banquillo escarlata y era esperado con ansia por algunos jugadores choriceros, y que a la hora de sentarse con los meros meros se dejó pedir una muy buena lana para firmar, muy a su estilo, y además solicitó dos años de contrato, para que la dirigencia lo blindara y le asegurara su permanencia, porque no estaba
dispuesto a cambiar de aires a las primeras muestras de fracaso.
Me dice mi Judas que los jerarcas del conjunto mexiquense lo escucharon con atención por una mera cuestión de educación, pero en cuanto salió de la oficina, comenzaron a echar telefonazos para buscar otros candidatos.
Primero le hablaron a Antonio Mohamed, quien les dijo que estaba ocupado con el proyecto con Huracán y que estaría disponible para mayo, luego recurrieron a Ricardo La Volpe y no tardó mucho para que se diera el arreglo, porque el argentino no se puso exigente ni pidió las perlas de la Virgen ni mucho menos. Es más, la primera propuesta económica que le pusieron sobre la mesa le pareció fantástica, por lo que solo me toca decir que Don José Manuel de la Torre se quedó como el perro de las dos tortas, sin Gallos ni Diablos.
Por andar de avorazado, ahora mi buen Chepo va a tener que esperar otro rato para que vuelvan por ahí a surgir algunas ofertas, y a los integrantes del Toluca nomás les aviso que se les va a aparecer el Diablo, y ahora a andar derechitos porque el Bigotón no se va a tocar el corazón para echarle ojo a las fuerzas básicas y comenzar a sacar algunos prospectos para mandar a la banca a los hue… sudos que no quieran jalar con él.
Gracias, Valencia
¿A qué santo le habrá rezado Gerardo Torrado para que el Valencia derrotara al Betis?
Más allá de que seguramente como compatriota de Andrés Guardado y Diego Lainez quería lo mejor para los mexicanos y lo mejor era el pase a la final de la Copa del Rey, también es cierto que la caída de los albiverdes le evitó dolores de cabeza al director deportivo de Selecciones Nacionales.
Y no, no me refiero al pasado del Borrego, quien jugó con el Sevilla, archirrival del Betis, sino a las complicaciones por el calendario. La final de la Copa del Rey está programada el 25 de mayo en el Benito Villamarín, apenas dos días después del inicio del Mundial Sub 20.
No me quiero imaginar las broooncotas en las que se iban a meter en Selecciones Nacionales para hacerle manita de puerco al Betis, a ver si les prestaban al chamaco Lainez, pues a diferencia de la obligatoriedad que existe en las convocatorias a selección mayor, en categorías menores los clubes no están forzados a ceder a sus futbolistas.
Para colmo, la final se disputará en la casa del Betis, así que imagine usted si Quique Setién iba a querer prescindir de Dieguito para tan importante cita.
Así que ahora Torrado y compañía podrán aplican la del “les tengo una buena y una mala, ¿cuál quieren primero?”, pues si bien Diego no podrá codearse contra el Barcelona, sí podrá estar a disposición para medirse a Italia, Japón y Ecuador como el líder del Tri Sub 20.
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