Las miradas de España no estarán en el amistoso contra Bosnia y Herzegovina, sino en el mítico estadio de Wembley.

En segundo plano quedó el duelo amistoso de hoy entre la Furia Roja. Y es que la atención la roban las críticas sobre el técnico Luis Enrique y el accionar de la selección, que ya solo piensa en despedir el año con una victoria.

España lleva dos derrotas al hilo y un paso discreto por la Nations League, donde necesita un empate entre Croacia e Inglaterra para meterse al Final Four.

“El equipo está bien. Ayer (viernes) pudimos entrenar y analizar el partido. El equipo está bien de moral y darle la vuelta en el siguiente partido. Es un amistoso.

“Hasta marzo no volveremos a juntarnos de nuevo, pero para mí mañana (hoy) es una prueba importante por el hecho de poder ver a jugadores que no han tenido muchos partidos y poder verlos en un ambiente de aelección y en un partido muy interesante”, comentó Luis Enrique.

El estratega español también tuvo que hacerle frente a los cuestionamientos sobre David De Gea, el más señalado en la derrota ante Croacia.

“A un portero no le marcan goles por que esté más o menos acertado, el balón ha llegado ahí, ha pasado otras líneas. Aceptamos las críticas y eso es lo que creo que hacen mis jugadores.

“Luego, en mis preferencias no voy a pronunciarme. Mis actos hablarán más que mis palabras”, explicó Luis Enrique, el escudo en un 2018 de pesadilla para la Furia.

Staff I Agencia Reforma