La asociación del delantero argentino Lionel Messi y el lateral Jordi Alba dejó buenos dividendos ayer ante el Celta de Vigo, pues el Barcelona goleó 4-0 (5-1 global) y avanzó a los cuartos de final de la Copa del Rey del futbol español.

Desde la llegada de Ernesto Valverde al banquillo del conjunto blaugrana, Alba se ha convertido en uno de los principales socios en ofensiva de Leo, y juntos por la banda de la izquierda se han combinado para conseguir una importante cosecha de goles en la presente temporada.

Esta sociedad se vio reflejada hoy una vez más en el Camp Nou, cuando a los 13 minutos de haber iniciado el partido, Jordi Alba recibió por izquierda un pase de Andrés Iniesta, sacó un centro al área que Messi remató a bote pronto para poner el balón pegado al palo izquierdo que el arquero Sergio Álvarez no pudo detener.

A penas dos minutos después de haber abierto el marcador, una vez más Jordi Alba se sumó al ataque y sacó un centro raso retrasado que Messi impactó con la zurda y fue imposible de detener para el arquero del Celta.

En el 28, fue Messi quien en esta ocasión tomó el balón en el medio campo y puso un pase filtrado entre los defensas rivales que Alba recibió dentro del área y remató con la pierna izquierda para mandar el balón al fondo de las redes y colocar el 3-0 parcial en el marcador.

Ya con la goleada consumada en el Camp Nou trempanamente, los locales continuaron presionando a su rival y al minuto 31, el uruguayo Luis Suárez interceptó un mal pase retrasado del belga Pione Sisto hacía su arquero, y sacó un potente disparo para sumar un gol más a la cuenta de su equipo.

Con el 4-0 en el marcador, Valverde decidió mandar al campo en la segunda parte al francés Ousmane Dembélé y retirar del terreno de juego a Messi, quien abandonó el campo en medio de una gran ovación por parte de la afición culé.

Finalmente a los 87 minutos, el croata Ivan Rakitic puso la manita para la escuadra catalana con un remate de cabeza tras un saque
de esquina.