La cancha del estadio Nemesio Díez será el escenario donde estos equipos medirán fuerza en punto de las 17:00 horas, con Francisco Chacón como el encargado de aplicar el reglamento.

Al final del primer tiempo del partido de ida todo indicaba que la serie estaba totalmente inclinada a favor de los mexiquenses, los cuales, no habían sido mejores en la cancha, pero sí completamente contundentes.

Con esa ventaja, los pupilos del paraguayo José Saturnino Cardozo apostaron por el contragolpe, algo que les pudo haber funcionado si el portero Javier Campestrini no se hubiera convertido en la figura al salvar al menos dos ocasiones claras.

Hay que mencionar, sin embargo, que la visita regaló el espacio, algo que es inaceptable frente a un rival que quizá en calidad es menor, pero que tiene mucha voluntad y amor propio.

Para avanzar a la siguiente fase, los “Diablos Rojos” requieren de al menos el empate a uno o dos goles, o en su caso el triunfo; una igualada por tres o más tanto, así como cualquier revés, los deja fuera.

Mientras que el cuadro de la “Angelópolis” plasmó en estos primeros 90 minutos todo lo que fue a lo largo de la fase regular, es decir, un conjunto que pelea, que no da ningún balón por perdido y que tiene mucho orgullo para tratar de salir adelante, pese a sus limitaciones.

Aunque no pudieron sacar el triunfo en el encuentro de ida , sin duda el haber venido de atrás para conseguir el empate significó una victoria moral para los jugadores, premio a ese espíritu de nunca darse por vencidos.

Para el segundo encuentro de esta eliminatoria será necesario que mantengan esa entrega, pero que corrijan las fallas en su cuadro bajo que les costaron los goles, porque de otra forma, sus posibilidades serán mínimas.

Los de “La Franja”, se llevaron siete goles en su última visita a Toluca en una fase final y ahora quieren seguir en la pelea por el título, por lo que necesitan el triunfo por cualquier marcador o en su caso un empate por más o tres anotaciones.