Los Rayados tomaron su boleto de avión a la liguilla con destino a Torreón, en una noche histórica para Rogelio Funes Mori, quien se convirtió en el segundo máximo goleador del club.
Cuando metió el tanto 96 al minuto 8 y con el que empató a Mario de Souza Mota Bahía, Funes Mori corrió a los brazos de Dorlan Pabón festejando el gol como avioncito tal y como lo hacía el brasileño y a la vez el que se enfilaban a lo que hace unas semanas parecía casi imposible: a la liguilla.

Luego, con su segundo de la noche, apenas cuatro minutos después y que sentenció el 2-0 ante el Atlas, Funes Mori le dio temprano, en una velada de fiesta, el pase a la liguilla a la afición, que ahora en vez de abuchear como pasó en muchos partidos en el estadio BBVA en este torneo, celebró el pase a la
fiesta grande.

Rayados llegaron a 27 puntos, mismos que el Morelia, que sin embargo terminó en séptimo por mejor diferencia de goleo; Monterrey culminó en octavo, en un rescate de 11 unidades de 15 posibles que encabezó el entrenador Antonio Mohamed, al sustituir al uruguayo Diego Alonso.

Ahora, el Monterrey se medirá en los cuartos de final al Santos, líder general, que acabó  con 36 puntos.

Anoche, Monterrey pudo haber metido muchos más, sobre todo en la primera mitad, pero Camilo Vargas fue factor y en el segundo tiempo, por ejemplo, evitó lo que pudo haber sido un golazo de Vincent Janssen al 79’.

A la noche no le podía faltar una emoción más, al darse el regreso del eterno capitán José Basanta, quien no pisaba cancha desde el 23 de febrero pues fue operado por una lesión en la cadera.
Pabón, quien le cuidó el gafete en su ausencia, se lo puso en el hombro y luego lo abrazó, mientras mucha gente de pie aplaudía al jugador con más títulos en
el club.

Lo malo de la noche de Liguilla Rayada fueron las lesiones. Rogelio Funes Mori salió al minuto 38 lastimado, pero sobre todo Miguel Layún al 43’, tras sufrir un atorón en el tobillo derecho.
Rayados habían sufrido para ganar en casa, incluso con el Turco tuvieron empates desalentadores ante Chivas y Veracruz, pero ayer cerraron con ese estilo vertical y frontal que a la gente le había gustado en su anterior gestión.

Jesús Carvajal I Reforma