Sexy Star dejó en claro que ella no es una luchadora malintencionada y nunca quiso lastimar a la estadunidense Rosemary en Triplemanía 25.
La luchadora regiomontana se manifestó en Twitter a lo que llamó “ataques cibernéticos” de parte de promotores y luchadores, luego de que retuviera el Reina de Reinas en el evento más grande de Triple A en el año.
Un día después de que Dulce María García Rivas, nombre real de Sexy Star, aplicara una palanca al brazo a Rosemary, la estadunidense escribió una carta que subió a su cuenta de Twitter criticando a la regia, pues afirma que quiso lastimarla con dolo del brazo.
Ante la queja, el mundo de la lucha libre atacó a Sexy llamándola poco profesional.
Y tras los comentarios, 9 días después, la regia dejó en claro su postura en un escrito de cuatro hojas que subió también a su cuenta de Twitter @Sexydulceg.
“(Esta carta) la dedico a Sexy Star, un personaje que se me fue prestado y que a muchos consta que con honor, honestidad, respeto, entrega y pasión he defendido y portado durante 11 años, mismos valores que me pertenecen a mí, Dulce María García Rivas, y que no dejaré que nadie, con versiones no sostenida por pruebas, desprestigie”, comentó la regia al final del escrito.
Sexy afirmó que no conocía a Rosemary y que sus primeras palabras las tuvieron minutos antes de la lucha.
“Me dirigí con la estadunidense, le pregunté si se sentía bien con lo que presentaríamos o si quería cambiar algo… Los que han trabajado conmigo saben que siempre lo hago así, con la de idea de proteger cualquier incidente a quienes trabajan conmigo y a mí misma, no sólo por ética y por los valores que en mi casa me han enseñado… sino porque siempre he tenido la conciencia del peligro que corremos todos los que trabajamos en la lucha”, sigue la publicación.
“Quiero aclarar que en ningún momento ella me pidió verificar o marcar lo que presentaríamos, algo que para mí siempre es importante, así que yo di por hecho que ella conocía y tendría el control de todo lo que haríamos”.
Triple A decidió, sin dar a conocer los motivos, desconocer a la regia del título Reina de Reinas.