Enrique Bonilla, presidente de la Liga MX, anunció este lunes que no habrá ningún tipo de sanción en contra de Tigres y Monterrey, luego de los hechos violentos que se registraron entre aficionados de ambos clubes en el clásico regio, y que dejó a un seguidor gravemente herido.

El directivo declaró que sí se pensó suspender la edición 117 del derbi norteño; sin embargo, dijo, pudo haber tenido consecuencias más graves.

“Se platicó con las autoridades y lo que recomendaron fue que el evento tenía que seguir (porque) hubieran sido mucho mayores las consecuencias de suspenderlo, que permitir el encuentro”, aseveró.

En declaraciones a TDN, el dirigente justificó esta situación al señalar que “las cosas no se hacen nada más porque sí, siempre hay un trabajo atrás, siempre se busca lo mejor”.

Así mismo, Bonilla dejó claro que en lo que fue el estadio Universitario no se dieron hechos que lamentar, y que donde se dio la situación del seguidor de Tigres fue en un punto lejano.

“Lo que se acordó en la junta previa se cumplió, en la zona del estadio hubo paz y tranquilidad, por lo que debemos tener muy claro que esto fue a una distancia considerable del estadio, esto no fue en el perímetro en el que se estableció la seguridad”, apuntó.

Destacó que los actos de violencia no son un problema del futbol ni del deporte, sino de la sociedad, “Llevamos mucho tiempo en el que hemos pedido que se acabe con estos grupos (barras) y también tenemos mucho tiempo pidiéndole a las autoridades que endurezcan las penas”, sentenció.

Redacción I Pachuca