La lesión de Enrique Ponce resultó ser más grave. Su rodilla izquierda está destrozada: una fractura ósea se suma a la rotura de ligamento lateral interno, en la rodilla dañada, por la caída que sufrió ayer en la Feria de Fallas, al ser prendido por el toro Declamador, de 532 kilos, de Olga Jiménez, reveló su apoderado Victoriano Valencia.
“Tiene la rodilla destrozada. Anoche vieron que también tiene una fractura ósea. No sabría decirte si en la cabeza de la tibia”, declaró Valencia para el diario español EL MUNDO.
Instantes previos a las lesiones en la caída, la figura mundial del toreo recibió una cornada en la región proximal del muslo izquierdo, y ayer se le detectó también una fractura en la costilla.
“Qué pena, el percance vino cuando estaba cuajando al toro, al que iba a cortar dos orejas. Había cortado una al anterior y otra en su primera corrida. De no ser por la espada y por este gravísimo percance, hablamos de un torero de seis orejas en Fallas”, lamentó Valencia.
Además, el apoderado mencionó que el diestro pasó una noche complicada en Valencia a causa de los intensos dolores. El matador será trasladado en ambulancia hoy a Madrid para ser intervenido quirúrgicamente por el doctor Ángel Villamor.
Ponce, de 47 años, cumplió el pasado sábado 16 de marzo, 29 años de alternativa, que recibió justamente en su ciudad, Valencia, de manos de Joselito, de padrino, y Miguel Báez El Litri, de testigo.
Citlalli Medina I Agencia Reforma
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