la Liga MX Femenil vivió su primer torneo en este año y las Tuzas del Pachuca fueron protagonistas, colocándose como las referentes del futbol femenil en México. Desde enero que estuvieron con las visorias y comenzaron los entrenamientos, las hidalguenses comenzaron a llamar la atención en el entorno nacional.

El primer título del futbol femenil, la Copa MX, fue conquistado por las dirigidas por Eva Espejo con autoridad, además de que llegaron a la final en la liga, cayendo ante las Chivas de Guadalajara, pero siendo el equipo a seguir a lo largo del campeonato.

La primera aventura que emprendieron fue dentro de la Liga Mayor Femenil, torneo en el que participaron durante algunas fechas para ir tomando forma y entendiéndose dentro de la cancha, algo que les ayudó para llegar a ser superiores al resto de las escuadras en el torneo de copa, celebrado en mayo, en el que arrollaron a sus rivales.

De inicio, Chivas, Morelia y Toluca les metieron seis goles, a cada equipo, en la fase de grupos, llegando a la gran final ante Xolas de Tijuana, de las que no tuvo piedad y les pasó por encima con un marcador de 9-1 para hacer historia y alzar el primer título del futbol femenil mexicano.

Posteriormente, Espejo y su cuerpo técnico buscaron más futbolistas para apuntalar su plantel y ser una de las escuadras más competitivas de la Liga MX, que inició a mediados de año con el Apertura 2017, siendo desde el inicio consideradas el rival a vencer.

Nombres como el de la hidalguense Berenice Muñoz, anotadora de los primeros goles en la historia de la liga, Jaquelin García, Miriam Aguirre, Mónica Ocampo y Karla Nieto fueron los primeros referentes de la afición que siguió el torneo.

A pesar de algunos altibajos en la segunda parte de la campaña, las Tuzas lograron cerrar bien y fueron segundo lugar del Grupo 1, avanzando a las semifinales, donde dieron cuenta de Tigres con un sufrido marcador global 4-3 para instalarse en la gran final y enfrentar a Chivas.

Ahí, las del Rebaño Sagrado les exigieron y pese a tomar ventaja en la ida, disputada en el Hidalgo, 2-0, fueron superadas en casa de las rojiblancas con un 0-3 que les costó el título, aunque se quedaron en el corazón de la afición por la entrega que se les vio en cada partido.