Un incendio arrasó este martes un local de karaoke en el sur de China dejando al menos 18 muertos y cinco heridos, un acto que las autoridades piensan que pudo ser deliberado y que la policía atribuyó a un sospechoso por el cual ofreció una recompensa.

El incendio se produjo después de la medianoche en un edificio de tres plantas en la ciudad de Qingyuan, en la provincia de Guangdong y logró ser apagado poco antes de las 01H00 hora local, informó la policía.

Según la investigación preliminar el incendio fue intencional, informó el Departamento de Seguridad Pública de Qingyuan en la red social Weibo.

“Las autoridades de seguridad pública están intensificando sus investigaciones”, indicó el departamento regional.

El sospechoso comenzó una discusión, después utilizó una motocicleta para bloquear la entrada al edificio y desató el incendio, informó la cadena estatal de televisión CCTV, que indicó que el hombre estaba prófugo.

La policía dijo que con el objetivo “de capturar rápidamente al sospechoso” está ofreciendo una recompensa de 200.000 yuanes (32.000 dólares, 26.000 euros) por cualquier información que pueda ayudar al arresto del individuo, identificado como un hombre de 32 años con marcas de quemaduras en las cadenas.

En su comunicado, las autoridades no especificaron el lugar del incendio, pero los medios estatales indicaron que éste afectó a una pequeña sala de karaoke.

Un video del lugar publicado por el diario estatal Global Times en Twitter muestra las llamas que salen del edificio, ante la mirada de una multitud. En la grabación se ven las luces de un vehículo de emergencia.

El karaoke es una actividad muy popular en China, donde incluso en los centros comerciales hay espacios para que la gente se siente e interprete sus temas preferidos.

Dentro de la oferta hay establecimientos de todos los tamaños e incluso hay locales que ocupan varias plantas compuestos de múltiples salas “privadas” unidas por estrechos pasillos.

El local siniestrado en Qingyuan era más modesto y sólo tenía una única salida, que es la que el sospechoso habría bloqueado, según CCTV, un factor que podría hacer que el balance de víctimas aumente.

Pekín, China | AFP