Funcionarios federales arrestaron a 97 inmigrantes en una planta procesadora de carne en la zona rural de Tennessee este jueves, de acuerdo con el diario The Washington Post.

Según organizaciones de derechos civiles consultadas por el diario, el operativo en Southeastern Provision en el condado de Grainger, sería la redada laboral más grande en una década en un solo sitio de trabajo.

Diez personas fueron arrestadas por cargos criminales federales, una persona fue arrestada por cargos estatales y 86 inmigrantes fueron detenidos por estar ilegalmente en el país, dijo el viernes en una declaración Tammy Spicer, vocera de Inmigración y Control de Aduanas. Añadió que la mayoría eran mexicanos, sin dar una cifra.

El operativo llega después de una serie de redadas similares en tiendas 7-Eleven y otros lugares de trabajo durante la Administración Trump.

El Centro Nacional de Leyes de Inmigración y otros defensores de los inmigrantes dijeron que el ataque de Tennessee fue el más grande desde la administración de George W. Bush y desplegaron muchas de las tácticas de esa época, con un bombardeo sorpresivo de la fábrica, un helicóptero y calles bloqueadas, señala el Post.

“La gente está aterrorizada de conducir. La gente está aterrorizada de abandonar sus hogares”, aseguró al medio Stephanie Teatro, co-directora ejecutiva de la Coalición de Derechos de los Inmigrantes y Refugiados de Tennessee.

Desde que el Presidente asumió el cargo, los arrestos por inmigración han aumentado más del 40 por ciento y las deportaciones desde el interior de los Estados Unidos han aumentado un 34 por ciento.

Staff
Agencia Reforma