Al parecer, bajo la pintura más famosa de Leonardo da Vinci, Mona Lisa, existe una primera versión de la obra que, inclusive, mira hacia otro lado, afirma Pascal Cotte, investigador de la empresa Lumiere Technology, en París.
A través de su portal de internet, la BBC de Londres dio a conocer el caso del científico que afirma haber analizado el icónico retrato con una nueva tecnología llamada luz reflectante.
La imagen, descubierta por Cotte, presenta a la modelo mirando en otra dirección, pues en apariencia se trata de una joven que no muestra ni la famosa mirada directa de la pintura que presenta el Museo de Louvre ni los rasgos de la enigmática sonrisa que ha cautivado al público por más de 500 años.
Aunque el Museo de Louvre no ha hecho comentarios al respecto, el investigador francés presenta sus hallazgos en un libro llamado Lumière on the Mona Lisa, the book that rewrites history.
En su página de internet, Cotte describe que en 2004 el museo le dio acceso a la pintura que revisó con la técnica llamada Método de Amplificación de Capas (MAC), que se basa en la obtención de imágenes con una cámara multiespectral que graba la luz reflejada en 13 diferentes ondas de luz.
Esto genera unas mil 650 imágenes en promedio que revelan la interacción entre la luz y la materia en cada milímetro de la pintura, lo que hace posible reconstruir el génesis de un trabajo de arte, su cronología y las diferentes fases de composición.
Se cree que Leonardo trabajó en la obra entre 1503 y 1517, mientras estaba en Florencia, y después en Francia. Por mucho tiempo se ha debatido acerca de la identidad de Mona Lisa y durante siglos se ha creído que se trata de Lisa Gherardini, la esposa de un comerciante de seda florentino.
Pero Cotte cree que la imagen que ha reconstruido bajo la superficie de la pintura es la Lisa original de Leonardo y que el retrato es, de hecho, de una mujer diferente.
Otro enigma
A la par que ha salido a la luz la historia de Cotte, un investigador italiano afirma haber hallado en Rusia un cuadro similar a La Gioconda, el cual podría ser una obra de Leonardo da Vinci, aunque matiza que es solo una hipótesis.
Silvano Vinceti, que ha promovido este año la búsqueda en Florencia de los restos de la mujer que pudo servir de modelo para Mona Lisa, señaló que en 2011 recibió la llamada de un magnate ruso que recurrió a sus conocimientos en la materia para que investigara el origen de una pintura de su colección privada.
El cuadro consiste en una figura femenina muy parecida a la Gioconda retratada por Da Vinci a comienzos del siglo 16, aunque en esta versión la mujer aparece entre dos grandes columnas, al igual que en uno de los dibujos preparatorios de la obra atribuido a Leonardo.
“Yo no digo que sea otra Gioconda de Leonardo. Digo que todos los elementos ponen las bases de una posibilidad. Seguramente son indicadores muy interesantes y altamente fascinantes que evidencian una serie de coincidencias que pueden ser casuales o atribuibles a Leonardo”, afirma Vicenti. (Con información de EFE, BBC y Lumiere Technology).
