Por incumplimiento a las medidas correctivas ordenadas en un procedimiento administrativo instaurado desde julio del 2017, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuró la empresa Caleras Bertrán, ubicada en Atotonilco de Tula.

Asimismo, la dependencia impuso una multa de un millón 370 mil 200 pesos, equivalente a 17 mil veces la Unidad de Medida y Actualización (UMA), dio
a conocer en un comunicado.

Según la Profepa, desde mediados del año pasado ordenó a la firma cumplir diversas disposiciones; entre éstas, la actualización de su Licencia Ambiental Única (LAU).

Ante la omisión le impuso como medida de seguridad la clausura total temporal de sus equipos que generan emisiones a la atmósfera, identificados como Envasadora número 3, Envasadora número 4, Hidratadora número 1, Hidratadora número 2, Hidratadora número 3 e Hidratadora número 5.

La suspensión de la calera prevalecerá hasta que la empresa exhiba la autorización  vigente, la cual es emitida por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), añade la misiva de la dependencia federal.

Redacción | Mineral de la Reforma