De acuerdo a un estudio realizado por la asociación Cancer Research UK y Cancer Reasearch Worldwide, el azúcar de manosa podría ralentizar la extensión de distintos tipos de cáncer y mejorar los efectos del tratamiento con quimioterapia.

Aunque las pruebas primarias fueron en ratones, los científicos esperan que éstas también sean aplicables en seres humanos.

Para el experimento, el equipo investigador administró manosa, un tipo de azúcar que se puede encontrar en frutos como los arándanos, a ratones con cáncer de páncreas, pulmón y piel, y comprobaron que el crecimiento de los tumores se ralentizaba sin causar efectos secundarios, según BBC.

La manosa impide que los tumores utilicen la glucosa para crecer.

De igual manera, este monosacárido no solo es bueno en impedir que determinados cánceres crezcan, sino que ha mejorado los resultados de algunos tratamientos. Los investigadores descubrieron que el tratamiento con manosa aumentaba los efectos de la quimioterapia, disminuyendo el ritmo de crecimiento del tumor y su tamaño, escribió el experto en salud de la BBC.

En el caso de otros tipos de cáncer, como la leucemia, el osteosarcoma, el cáncer de ovario y el intestino, algunas células respondieron bien a la manosa y otras no. Su respuesta parece depender de los niveles que estas células tengan de una enzima que descompone esa azúcar.

Kevin Ryan, profesor del Instituto Beatson de Cancer Research UK, dijo que había encontrado una dosis de manosa que “puede bloquear la glucosa suficiente para retardar el crecimiento del tumor en ratones, pero no tanto como para impedir el crecimiento de los tejidos normales”.

Los expertos que realizaron el estudio advierten que nadie debe tomar manosa creyendo que se va a curar; todavía hacen falta hacer muchas más pruebas.

Con información de BBC

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