Cada que inicia un nuevo año todos queremos lograr mejoras en nuestra vida, por lo que, en muchas ocasiones, las supersticiones hacen su aparición y llevamos a cabo diversos rituales; según las costumbres familiares o incluso los consejos que encontramos en alguna página de Internet, hacemos todo para tratar de cumplir nuestros anhelos (comer doce uvas o preparar maletas).
Una de las tradiciones más arraigadas y que procede de inicios del siglo XIX, es comer doce uvas con las campanadas que anuncian el año nuevo. Cada una de ellas representa un deseo de bienestar para el periodo venidero.
Para los que buscan buena suerte y dinero, una de las acciones más comunes es comer lentejas cocidas o colocar un puñado de ellas en las esquinas de la casa, lo cual, supuestamente, traerá buena fortuna a sus habitantes. Dicha tradición comenzó en Roma y se popularizó en toda Europa, para llegar a América a través de los españoles. Se dice que quien más lentejas coma, más riqueza tendrá.
Los amantes de los viajes tienen una opción para ir de visita a muchos destinos el próximo año. Sólo basta con preparar sus maletas, como simulacro, y entonces salir con ellas a rodear la manzana donde viven.
Siempre que hay un cambio de año, una de las costumbres más populares es usar calzones rojos o amarillos para atraer amor o dinero a la vida de cada persona.
Hay quienes usan ambos, para ganar en los dos temas.
¿Ustedes lo han hecho?
¿Les ha funcionado?
Mientras sabemos si estos rituales son efectivos o no, podemos hacerlos, pues representan una divertida forma de iniciar el nuevo año con el deseo de que sea un gran ciclo para todos.
Sara Elizondo
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