Además de mermar la seguridad pública de la ciudad, el club Pachuca se “ahorra” más de 165 mil pesos en ese servicio durante los partidos de futbol en el estadio Hidalgo, lo que redunda en más de 3 millones 300 mil pesos cada temporada.

Cada 15 días, en la jornada regular, y entre semana, cuando hay partidos de copa, cientos de elementos policiales son distraídos de sus encargos de patrullaje para resguardar el inmueble y garantizar la seguridad de asistentes.

De acuerdo con información generada por la Secretaría de Seguridad Púbica de Pachuca, esta corporación destina durante cada encuentro diez autopatrullas, 19 motos, 50 elementos preventivos y 20 de Tránsito y Vialidad. La fuerza total de la corporación se acerca a 500 elementos.

Según dos empresas de seguridad privada consultadas por Criterio, las cuales pidieron omitir sus razones sociales, el cobro de guarda, vigilancia y custodia de un elemento por 12 horas oscila entre mil a mil 200 pesos; sin embargo, cuando se trata de elementos armados, el precio se eleva de mil 700 a dos mil pesos por medio turno.

A ello, se suma el costo por patrulla, las cuales cobran por kilómetro recorrido durante los rondines: entre 50 y cien pesos.  “Si el partido comienza a las 18:00 horas los policías deberían estar dos horas antes y dos horas después, por lo cual podría cobrarse medio turno, de seis horas”, dijo uno de los entrevistados.

Este año futbolístico, 2017-2018, Pachuca jugará como mínimo 17 partidos de liga y tres de copa; cuatro de ellos contra equipo de alta convocatoria y, si califica a las finales, partidos de liguilla.

Aunque el documento realizado a solicitud del regidor Independiente de Pachuca, Navor Rojas, no precisa costos, el sueldo de un municipal oscila entre los 10 mil 298 pesos mensuales –alrededor de 343 pesos diarios– y 17 mil 796 para un policía primero.

Además, de acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH), ésta destina 200 elementos, los cuales tienen un sueldo promedio de 11 mil pesos mensuales: 366 pesos diarios.

Si el club de futbol Pachuca pagara un día de salario por elemento que dispone en cada juego, los cuales se despliegan de las 14:00 hasta después de las 22:00 horas, debería erogar 24 mil 10 pesos por 70 agentes municipales y 73 mil 200 por los 200 estatales, sin considerar la movilización de patrullas y equipamiento: alrededor de 97 mil 210 pesos.

A esto, el asambleísta dijo no concordar, pues “está a ojos de todos los ciudadanos el amplio despliegue oficial, que en caso de partidos premier también se traslada a elementos de otros municipios a reforzar la vigilancia del estadio de futbol”.

Rojas cuestionó que el uso de oficiales a cargo del erario no representa un ingreso al municipio; en cambio, vulnera la seguridad de la ciudad, que ha visto incrementar índices de robos con violencia, incluidos atracos a tiendas departamentales, advirtió el regidor.

“El Club de futbol Pachuca ha recibido durante 22 años muchas canonjías, entre ellas las conocidas de no pagar predio, luz, agua, de que no paga prácticamente consumo de alcohol al ampararse en una licencia de la cervecera para pagar una cantidad irrisoria”.

Consideró que la merma a la seguridad resulta alarmante, pues “la Pachuca de antes ya no está, hoy hay una Pachuca donde hay inseguridad, donde hay robos a cuentahabientes, a tiendas departamentales”.

Por ello, añadió, es importante que el club de Jesús Martínez  Patiño pague por el servicio

“Es importante no descuidar la seguridad pública en pro o beneficio de un equipo de futbol, porque eso atenta contra la ciudadanía”, insistió.

Para Rojas Mancera, calcular lo que equipo debe pagar por la seguridad “es sencillo”. “Preguntemos cuánto costaría al club pagar una seguridad privada, que implica, además, consumó de gasolina y uso de equipo como patrullas y lo prorrateamos”.

Añadió que con la seguridad de la población “no se puede jugar”.

“El pago debe ser sustancial, que no nos regalen pelotitas o boletos de entrada, que con eso no se detiene delincuentes”.

VULNERADOS

El coordinador de Seguridad estatal, Uriel de Jesús Moreno Castro, reconoció que el resguardar partidos de futbol vulnera el estado de fuerza, aunque consideró que no de manera significativa.

Sobre el número de efectivos que destinan a partidos estelares, excusó no poder proporcionar el dato. “No tenemos el número exacto, porque finalmente es una vulneración al estado de fuerza”.

“El equipo local tiene su grupo de seguridad, de todos modos la policía estatal para efectos disuasivos y de control metemos un grupo de gente”, añadió.

“Nosotros mandamos un estado de fuerza y se coordina con la policía municipal de Pachuca para efecto de mantener la seguridad en el perímetro del estadio. Afortunadamente no hemos tenido percances de gravedad”, sostuvo.